Mientras la población del municipio de Centro sigue careciendo de los servicios básicos, entre estos de agua y pavimentación, al grado que la capital del estado ser ha ganado el mote de “villa-bache”, porque hay colonias proletarias donde sus calles son verdaderos cráteres, el alcalde de Centro, Humberto de los Santos Bertruy para celebrar los 450 años de haberse fundado Villahermosa, realiza onerosos gastos que en tiempo de abundancia o de las vacas gordas, sería bienvenidos, pero ahora que hay pobreza, que no hay dinero para derrochar en fiestas, se ve mal porque cada peso debería utilizarse para resolver las necesidades más apremiantes de la misma ciudadanía. Metido en su mundo de cristal, en su burbuja y con esas ínfulas de soberbia de la que ha caracterizado toda su vida, Humberto de los Santos Bertruy no tan solo traicionó la confianza de quienes se la rifaron con él, cuando nadie daba un peso a su favor, mucho menos creían que fuera a ganar la alcaldía de Centro, por lo que una vez que obtuvo el triunfo y ya montado en la alcaldía, les pago los favores de campaña a la inversa, les dio una patada en el trasero para incrustar en su gabinete a puros priistas advenedizos que alentaba a los adversarios (candidatos perdedores priistas) para que ganaran en las urnas, luego entonces si así les paso a quienes trabajaron en su campaña, la propia población de Centro no se puede esperar que les lleguen los beneficios sociales, porque como todo resentido social solo piensa en el cobro de afrentas del pasado, sin entender que el pueblo también cobra las afrentas, que así como le dieron la oportunidad de ganar la presidencia municipal, si intenta buscar otro cargo público ya sabrá lo que es amar a Dios en tierra propia, pues perdería drásticamente. Es inconcebible que para celebrar los 450 años de la fundación de Villahermosa, no haya escatimado esfuerzo, ni recursos económicos, gastando millones de pesos en forma onerosa, ostentosa, en forma derrochadora, mientras hay colonias de Villahermosa, ya no se diga las comunidades rurales, que no les llega el agua, donde existe una deficiente recolección de basura, y lo más drástico que sus calles siguen hechas pedazos, convertidos en cráteres, mientras el alcalde en forma mezquina se vanagloria de ser un alcalde vanguardista, cuando es todo lo contrario, solo bastaría salir a la calle, subirse a un taxi o tomarse el café para sentir el repudio popular en contra de Humberto de los Santos Bertruy como uno de los peores alcaldes de todos los tiempos. El peor problema que enfrenta Humberto de los Santos Bertruy, el peor lastre que lleva sobre sus espaldas, es su propio hermano Ismael de los Santos Bertruy, quien se ha convertido en el poder detrás del trono, quien realiza negocios, quien cobra el diezmo, quien controla y llenó toda la zona remodelada o zona histórica de Villahermosa de ambulantes pese a que existe un acuerdo con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), que para invertir recursos en la remodelación de esa zona debe estar libre de vendedores ambulantes, tal a como lo hizo en su momento el ex-alcalde Jesús Alí, que quitó a todos del Centro Histórico, pero una vez que llegó Bertruy y pese a que el secretario del ayuntamiento fue delegado del INAH en Tabasco, los acuerdos valieron un soberano cacahuate, pues pudo más Ismael que el propio Humberto, ¿por qué será?. Desde la primera ocasión, en que siendo secretario del ayuntamiento, Humberto quiso ser candidato del PRD a la alcaldía de Centro, en aquel histórico encuentro en el fraccionamiento Rio Viejo, de la ranchería del mismo nombre, en donde estuvo presente quien fuera dirigente estatal del PRD, Pepín López Obrador, quien llevó la voz cantante, quien propiamente encabezó la negociación fue Ismael de los Santos, pese a que ahí estaba el ahora alcalde, lo que se demuestra que es su cerebro, es quien opera acuerdos en el ayuntamiento de Centro por debajo del agua, es quién está haciendo los negocios “sucios” sin interesar que esté hundiendo a su hermano ante la población Villahermosina, porque hay una reacción negativa en cadena en contra del propio edil, lo que desde luego será crucial en las elecciones constitucionales de 2015. No se puede celebrar los 450 años de la fundación de Villahermosa con bombo y platillo, con suntuosas presentaciones de personajes, cuando las calles de colonias poblados y villas están en pésimas condiciones, esto es pretender darle pan y circo (romano) a la población para intentar paliar un descontento social que es evidente, por el pésimo trabajo del alcalde Humberto de los Santos. Ahora mismo la remodelación que se está haciendo en el Centro Histórico donde se invertirán cerca de cien millones de pesos es considerada una obra faraónica, innecesaria y dañina, un verdadero insulto a la población, por los adoquines, farolas, carretas, jardineras y bancas, porque los recursos económicos no están para derrocharse en forma innecesaria, burda, grotesca, porque además de intentar venderla como la obra del trienio, pretenden cerrar a la circulación vehicular, la avenida Madero y sus alrededores, que será solo para peatones y para aumentar los vendedores ambulantes en un nauseabundo negocio de Ismael de los Santos Bertruy y Manuel Vázquez, de hecho tienen convertido en un muladar todo el Centro Histórico o primer cuadro de la ciudad de Villahermosa, lleno de vendedores ambulantes; el centro es todo un Tepito, mientras el alcalde sabiendo que su hermano es el gran negociante solo exclama que los ambulantes tienen el derecho de ganarse la vida, si ciertamente eso es correcto, pero que no conviertan en un muladar el centro de la ciudad, porque si caminos por otros ciudades del país, sus Centros Históricos están libres de ambulantes, ¿y el acuerdo con el INAH, que lo hicieron?, ¿lo tiraron al cesto de la basura?. En la remodelación del Centro Histórico de Villahermosa, ni siquiera se integró a un proyecto de urbanismo y vialidad, no contempla todos los factores, solo es para peatones y ambulantes (el negocio de Ismael) no habrá un reglamento aprobado como lo hay ahorita como Zona Luz, aunque se lo pasan con el arco del triunfo, el negocio es lo único que les interesa, esa es la finalidad de la remodelación, porque ni siquiera el alcalde consultó a nadie, no socializó la obra para que todos los que están compenetrados con esa zona lo fueran asimilando, ahí hay hoteles, oficinas, restaurantes, instituciones públicas, museos, hospitales, consultorios médicos, casas de familia, a quienes cuando menos debieron consultar si querían que les llenaran de ambulantes al Centro histórico. Con cien millones de pesos bien se pudo haber comprado una recicladora de basura, y otro dragón para atacar de lleno los baches y cráteres, que hay por toda la ciudad y sus colonias que de veras hacen ver a la administración de Humberto de los Santos bertruy como la más nefasta, porque ni siquiera las pequeñas obras que están realizando han sabido “vendérsela” bien a la misma población que no cree en sus autoridades municipales, que ahora se lamentan el momento en que votaron en las urnas por el actual edil. La soberbia es mala consejera. Total, que siga la fiesta, que el pueblo no interesa.
OJITOS
Hace algunos días nos desayunamos con el anuncio de que ahí donde actualmente se encuentra el Frigorífico y Empacadora de Tabasco, la franquicia del World Trade Center (WTC) estaría aterrizando a partir del 2017, en ese terreno de 2.5 hectáreas que quedaría libre cuando se concrete el desmantelamiento de ese centro de abasto que para desgracia de los tabasqueños fue acabado por las ambiciones mezquinas de los propios ganaderos que la manejaban, pues le metieron la mano al cajón para llevárselo a la bolsa y aunque los gobiernos en turnos le inyectaron recursos millonarios siempre fue lo mismo, el robo descarado de sus finanzas. El llamado centro internacional de negocios sería edificado con inversión probable de 500 millones de pesos, por grupos de empresarios nacionales, entre los que destacan Soriana, Cotsco, Cinemex y Orsan, entre otros, ya que están interesados en traer a la entidad esa franquicia por el “Boom Petrolero que se avecina al realizarse la reforma energética. Todo está bien, pero ¿quién venderá ese inmueble? o ¿a quién pertenece?, porque si no mal recuerdo existe un decreto de enajenación a título gratuito a favor de la Unión Ganadera Regional de Tabasco, expedida por el entonces gobernador Enrique González Pedrero en el que se establecía cuál sería su uso o actividad, trayendo un apartado en letras chiquitas donde dejaba en claro que si por alguna circunstancia se dejaba de utilizar o se extinguía el motivo por el que se enajenó que en este caso específico era para la construcción del Frigorífico y Empacadora de Tabasco, el bien inmueble regresaría a ser propiedad del gobierno del estado. ¿Cuál vender?, de revisarse ese decreto la Unión Ganadera Regional podría llevarse el chasco de su vida, dejar de hacer cuentas alegras con la venta de ese predio donde todavía quedan algunos fierros viejos del otrora orgullo de los ganaderos como lo fue el frigorífico, porque al extinguirse la razón fundamental por el que les enajenaron a título gratuito ese predio a los ganaderos, se estarían quedando en la calle, porque al acabarse el Frigorífico esa propiedad tendrá que volver a manos del gobierno estatal. De la misma forma, el actual gobierno tendrá que revisar el decreto de enajenación, porque en la época que gobernó Manuel Gurría cuando se formó el comité de desincorporación y enajenación de bienes del gobierno, se encontraron con dos o tres casos parecidos, en que el gobierno de Enrique González Pedrero había enajenado algunos predios a títulos gratuitos a algunas empresas que al extinguirse quisieron quedarse con los bienes inmuebles, pero les aplicaron la ley y se recobraron las propiedades. Sin duda la UGR está en las mismas condiciones con ese predio de 2.5 hectáreas que era del gobierno estatal y que les fue cedida a los ganaderos para construir el Frigorífico en donde también el gobierno aportó dinero para su construcción, de tal manera que al extinguirse el Frigorífico la propiedad debe regresar a manos del gobierno, por lo que entonces, la directiva de la Unión Ganadera Regional no puede vender lo que no les pertenece. Hay que revisar a fondo ese decreto de enajenación a título gratuito porque ahí está la verdad jurídica, por lo que los ganaderos no deben hacer cuentas alegres.
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