Pese a que desde el mes de febrero de 2020 la Fiscalía General del Estado solicitó a la directora de Educación Primaria de la Secretaría de Educación de Tabasco (SETAB), Rosalía Zapata Jiménez aplicar medidas cautelares a favor de la profesora Ana Cristal Arellano Espinosa, quien fuera agredido por su director, Ramiro Pérez Avalos, la funcionaria ha hecho caso omiso y al contrario, ha decidido protegerlo para que no sea removido como director del Centro Educativo Integral Número 1 de Centro, y por el contrario busca remover a la quejosa de esa escuela.
El 7 de febrero de 2020 el fiscal del Ministerio Público adscrito a la Unidad de Tramitación Masiva de Causas de Violencia de Género, Gabriel Iván Tzuc envió un oficio al entonces titular de la Unidad de Apoyo Jurídico de la SETAB, Jorge Alberto Cornelio Maldonado donde daba cuenta de que se había iniciado una Carpeta de Investigación en contra del director del CEI 1, Ramiro Pérez Avalos por la agresión cometida en contra de la profesora Ana Cristal Arellano Espinosa por lo que pedía aplicar medidas cautelares, por lo que este funcionario envió otro oficio con fecha 10 de febrero del mismo año a la directora de Educación Primaria, Rosalía Zapata que textualmente dice: por medio del presente, remito a usted para su atención oportuna, el oficio original número FGENTMC-963/2020, de fecha 07 del mes y año en curso, suscrito por el Lic. Gabriel Ivan Tzuc Pallan, Fiscal del Ministerio Público Adscrito a la Unidad de Tramitación Masiva de Causas de la Fiscalía de Violencia de Género derivado de la Carpeta de Investigación número CI-FGEN-239/2020 mediante el cual solicita lo que se trascribe a continuación:
Tomar las medidas pertinentes, necesarias e idóneas, en virtud de que al C. Ramiro Pérez Avalos quien labora en el “CENTRO EDUCATIVO INTEGRAL NUMERO 01CON CLAVE 27DPR1859B, ZONA ESCOLAR 03, SECTOR 13, CENTRO, TABASCO, ya que se le ha iniciado una carpeta de investigación en su contra por el delito de DISCRIMINACION cometido en agravio de la C. ANA CRISTAL ARELLANO ESPINOSA por lo que se acordaron las medidas de protección que establece el artículo 30 de la Ley General de Acoso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
Con el objetivo de garantizar la NO REPETICION de dicha agresión hacia la C. ANA CRISTAL ARELLANO ESPINOSA y así salvaguardar su VIDA e INTEGRIDAD PSOCOLOGICA, EMOCIONAL, MORAL Y FÍSICA”.
Por lo anterior, se solicita que, en lo inmediato se giran las instrucciones oportunas a través de la cadena de mando, para que se tomen las precauciones o acciones necesarias dentro de sus facultades y con ello dar debido cumplimiento a lo requerido en el oficio de referencia, debiendo de remitir directamente el informe de las acciones derivadas en relación a las medidas de protección decretadas a la autoridad oficiante; turnando copia de la respuesta que procediera a esta Unidad de Apoyo Jurídico”.
Como la omisión es la norma que impera en la SETAB, al no haber contestación por parte de la directora de Educación Primaria, el 13 de febrero de 2020 mediante el oficio FGENUI-241/2020 fue de nueva cuenta requerida por el fiscal del Ministerio Público para que cumpliera con las medidas cautelares.
Como la directora de Educación Primaria, Rosalía Zapata Jiménez, por razones desconocidas o solamente ella y sus cercanos saben sus razones por la que protegen al director del CEI número 1, Ramiro Pérez Avalos, quien en el año 2010, de acuerdo a los documentos que obran en la Fiscalía fue detenido por el presunto delito de violación y hay otras Averiguaciones en su contra, de los insultos verbales pasó a las acciones físicas, por lo que recientemente maniató y golpeó a la profesora Ana Cristal Arellano Espinosa y a la profesora Gabriela del Carmen Quiroz Sánchez, contando con la complicidad de las profesoras Adriana Galmiche y Rosario Guadalupe Contreras.
La primera de las agredidas o sea Ana Cristal Arellano volvió a interponer una nueva denuncia el pasado 10 de marzo, por lo que la Fiscalía de Atención Inmediata inicio otra Carpeta de Investigación CI-FGEN02/2022 en la cual narra la forma violenta en que fue sometido por el director del CEI número 1 Ramiro Pérez Avalos, quien en esta ocasión contó con la complicidad de Adriana Galmiche Rodríguez y Rosario Guadalupe Contreras Osorio, por lo que la fiscalía ante el peligro que corre su vida volvió a solicitar a la Secretaría de Educación de Tabasco aplique las medidas cautelares con la finalidad de que los agresores no vuelvan a incurrir en esos delitos.
Hasta la presente fecha la titular de la Unidad de Apoyo Jurídico de la SETAB, Guadalupe Castro Vidal, no ha movido un solo dedo para que se dé cumplimiento a las disposiciones de la Fiscalía, ya que según los conocedores está más dedica a vender su joyería Nice que en atender los asuntos jurídicos de la secretaría.
Tampoco la directora de Educación Primaria, Rosalía Zapata, ha aplicado las medidas cautelares que la fiscalía solicitó para proteger la integridad física de esta maestra, pese a que sabe que puede ser vinculada a proceso por ese desacatado está empecinada en proteger a Ramiro y desproteger a las agredidas.
Para no varias, la semana pasada, Ramiro Pérez que se siente intocable pese a la violencia física que ejecutó en contra de las dos maestras, organizó un linchamiento en contra de Ana Cristal y Gabriela del Carmen, utilizando a madres de familia que agredieron física y verbalmente a ambas profesoras.
Pese a que son las víctimas, al ser agredidas físicamente por el director del CEI número 1, la directora de Educación Primaria, Rosalía Zapata, está tomando como pretexto la agresión perpetrada por las madres de familia que fueron azuzadas por Ramiro, para quitarlas de esa escuela y reubicarlas a otra, por lo que no solamente han sido violentadas físicamente, y que ahora también hay violencia laboral, ya que en vez de quitar al director agresor de ese centro educativo por violentador, ahora las agredidas resulta que son las culpables de todo lo que está pasando, y como castigo deben abandonar el plantel donde han laborado por varios años.
Reza un viejo refrán que “para que la cuña apriete, tiene que ser del mismo palo”, y para violentar a una mujer tiene que actuar otra mujer, por lo que no cabe duda que la directora de Educación Primaria, Rosalía Zapata, en su calidad de mujer se está convirtiendo en verdugo de sus compañeras de género, de estas maestras violentadas a las que debería de apoyar para contribuir a bajar los índices de violencia en razón de género, pero no prefiere por razones que solo ella conocer prefiere convertirse en cómplice de un “pájaro de cuentas” como Ramiro Pérez Avalos, que ha estado metido en problemas con la justicia, como la acusación de presunta violación, de la cual habría que investigar y ahondar del cómo logró salir de la cárcel.
La directora de Educación Primaria ha requerido a las dos mentoras violentadas para que se presenten a su dependencia para tratar asuntos relacionados con el servicio, pero ha corrido la versión que las quiere quitar del CEI número uno y enviarlos a otro plantel, con la finalidad de proteger al director Pérez, lo más canijo es que hasta la supervisora Tila Beatriz Carballo en su calidad de mujer apoya al director en vez de apoyar a dos profesoras.
De nada sirve que desde la esfera gubernamental se haga aspaviento de que se está protegiendo a las mujeres para que no sean violentadas, cuando funcionarias de la Secretaría de Educación promueven y hasta aplauden la violencia en razón de género.
La Secretaría de Educación de Tabasco se sigue cayendo a pedazos por el contubernio, negligencia y corrupción que sigue prevaleciendo en su interior, prohijado por funcionarios que siguen actuando como en el pasado para descredito del gobierno de la Cuarta Transformación que en realidad es Transformación de Cuarta.
OJITOS
Y en la delegación del ISSSTE siguen los problemas también prohijados por funcionarios nefastos que han servido a gobiernos anteriores y que tienen una mentalidad retrógada, contra las que están luchando los trabajadores de base, a quienes pretenden amedrentar para que no se manifiesten. Ayer realizaron un nuevo plantón para exigir la renuncia de José Luis David Dagdug funcionario nefasto que se ha dedicado a realizar actos de brujería supuestamente para dañar a trabajadoras que están en su misma área, con las que mantiene un enfrentamiento.
Ayer los trabajadores del ISSSTE volvieron a realizar un paro de brazos caídos, para exigir la renuncia de David Dagdug, quien también es integrante de esa mafia que está carcomiendo las entrañas de esa institución, donde se trafica de todo, desde medicinas, subrogaciones médicas, licencias médicas, se le pide cochupos o diezmo a los proveedores, y nadie mete orden, porque hay mucho dinero de por medio, y pobre de aquel funcionario que quiera llegar a recomponer las cosas, de inmediato es atacado por esa mafia que quiere seguir engulléndose el pastel de irregularidades.
Quizás por esa razón, porque es mejor unirse a la mafia y obtener su rebanada del pastel es que Yndira Ruiz, quien debió actuar en forma salomónica en cuanto a la renuncia que plantea la base trabajadora, decidió delegar la responsabilidad en la titular de la unidad jurídica, Eva Aquino para que ayer ella lidiara con la base trabajadora que exige la renuncia de Dagdug, para que regresaran a trabajar o se les levantaría actas administrativas por no cumplir con sus funciones, “por el cual les pagan” en esa delegación.
Eva Aquino, la misma persona que publicaciones periodísticas en el estado de Veracruz la vinculan en la desaparición forzada de 19 personas y que se vino a refugiar a Tabasco, ayer quiso convencer a los trabajadores de regresar a laborar y que permitieran que José Luis David Dagdug siguiera laborando y que las autoridades competentes que investigan una denuncia penal en su contra determinen si hay o no responsabilidad, pero no logró convencerlos, perdió la paciencia y amenazó con comenzar a levantar actas administrativas en contra de los trabajadores que siguieran en paro.
Eva Aquino que también ha sido vinculada a la mafia que opera en el ISSSTE y por eso se rasga las vestiduras defendiendo a Dagdug, logró granjearse la confianza de la subdelegada de Administración Yndira Ruiz, laboró en la Fiscalía General de Justicia en el estado de Veracruz, como fiscal del Ministerio Público bajo las órdenes del Fiscal General Luis Angel Bravo Contreras cuando fue gobernador Javier Duarte.
En la desaparición forzada de 19 personas, encontradas en una fosa clandestina, la revista Proceso, en su momento, dio a conocer los nombres de quienes operaron la desaparición de los cadáveres: “María del Rosario Zamora, fiscal de Investigaciones Ministeriales; Gilberto Aguirre Garza, director de Servicios Periciales; Carlota Zamudio Parroquín, delegada de la Policía Ministerial, y Eva Aquino Tamayo, fiscal de distrito.Y con ellos, elementos de la Fiscalía y de Seguridad Pública, encargados de desaparecer los cuerpos.
María del Rosario Zamora, alias La Chacala, fue la encargada de dirigir la operación. Se trenzó en una discusión con militares, a quienes les ordenó dejar de grabar cuando se recuperaron los cuerpos. También confiscó todos los teléfonos de quienes acudieron a la barranca La Aurora. Carlota Parroquín y Eva Aquino ordenaron la alteración de los registros y “por instrucción de arriba”, instruyeron la modificación de los informes iniciales. Eva Aquino coordinó las acciones de la Fuerza Civil, cuyos elementos retiraron y se llevaron los cadáveres”. Esa es, de cuerpo entero la Eva Aquino que ahora está dedicada a amedrentar a los trabajadores del ISSSTE al estar ligada a la mafia que opera en esa institución.