Luego de un descanso de fin de año retomamos nuestra actividad periodística para seguir escribiendo la historia de cada día, deseándoles a todos ustedes mis lectores que en este Año Nuevo 2023, les vaya mucho mejor que el año pasado y que logren concretar los objetivo que se han planteado o que tienen en mente, lo importante es avanzar y no quedarse estancado.
Ayer inició en México la cumbre trinacional denominado la Cumbre de los Líderes de América del Norte, entre los mandatarios de Estados Unidos, Joe Biden; de Canadá, Justin Trudeau, y el anfitrión, Andrés Manuel López Obrador, en donde se tratarán temas tan importantes como la migración, el narcotráfico y su combate al crimen organizado, los energéticos, económicos y desde luego, refrendar el compromiso asumido con la firma del tratado comercial-libre comercio-de que las partes involucradas están obligados a cumplirlas para darles una mayor seguridad jurídica a los inversionistas de estos tres países.
Por lo pronto y aunque no lo quieran aceptar los seguidores de la Cuarta Transformación, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, seguramente por las presiones del gobierno norteamericano y para congraciarse con Joe Biden, dobló sus manitos y se vio obligado a romper con su esquema de “abrazos y no balazos”, pues el jueves pasado en Culiacán, Sinaloa, llovió balazos durante la captura de Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín Guzmán Loera, quien fuera el jefe del Cartel de Sinaloa y quien actualmente está preso en Estados Unidos.
La captura del Chapito, mostró la capacidad de reacción que tiene este cártel pues prácticamente paralizó todas las actividades en ese estado al desatar una brutal violencia con la quema de vehículos del transporte público y privado, de negocios, de tiendas de conveniencias y gasolinerías en un intento por evitar que su jefe fuera trasladado a la ciudad de México, pero aun con toda la violencia desatada nada pudieron hacer para impedirlo.
También ya se vio que las fuerzas armadas del país, con el apoyo del vecino país del norte, si pueden trabajar coordinadamente para ubicar y lograr el desmantelamiento de las principales cabezas de las bandas del crimen organizado o cuando menos ponerlos a raya, pero como en este gobierno se había optado por la política de “abrazos y no balazos” con la delincuencia organizada, que había conllevado a no tocar a esas fuerzas delictivas, dando origen a la Vox Pópuli de que existe un pacto secreto entre el gobierno de López Obrador con el Cartel de Sinaloa para no tocar a sus líderes, con esta aprehensión se rompe cualquier trato subterráneo o cuando menos, queda en el aire, hasta que haya una nueva recomposición gubernamental, que ya se verá cual será una vez que concluya la cumbre que hoy llega a su segundo día de encuentro, por lo que ya se verá si el presidente mexicano sigue con su política de “abrazos y no balazos”, o decide dar un giro para intentar acotar a esa delincuencia organizada que parece imparable en el país, pues en todas partes surgen hechos de violencia, donde Tabasco no es la excepción, pues casi diario en varios municipios hay ejecuciones que se atribuye a la disputa de las plazas para la distribución de enervantes. De hecho, al iniciar el mes de enero de 2023, se ha convertido en el más violento con cerca de 200 personas asesinadas en unos cuantos días, de allí que ayer durante el primer encuentro, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, exhortó al presidente López Obrador a fortalecer la seguridad entre ambas naciones.
De esta cumbre, al menos hay dos temas que serán cruciales entre los mandatarios de Estados Unidos y México, el problema migratorio y el narcotráfico, en el primero de los casos, corren las versiones de que el presidente de México ya aceptó que nuestro país se convierta en receptor de 30 mil migrantes que mensualmente Estados Unidos deportará por la frontera norte, lo que será un grave problema pues se deberá atender a esos inmigrantes, con alimentación, atención médica, alimentación y cobijo, además de que sus derechos humanos no sean vulnerados, y el segundo caso, es el combate al crimen organizado en nuestra nación, con la urgencia a detener a los capos de la droga, y el freno a la producción y exportación de fentanilo al vecino país del norte, que está generando muchas muertes por su consumo que es letal, donde el presidente de México no tendrá mayor movilidad, pues una cosa es lo que vocifera en sus mañaneras de que no permitirá la intromisión gringa en nuestro país pues deben respetar la soberanía y otra cosa es lo que hace cuando lo presionan o lo arrinconan, como en este caso de la detención de Ovidio Guzmán, que no fue un hecho casual, ni fortuita, sino un pedido expreso del gobierno americano, por lo que el presidente Obrador se vio obligado a cumplir, ordenando esta detención que traerá otras implicaciones.
Durante los cuatro años que lleva gobernando Andrés Manuel López Obrador, en nuestro país ni uno de los grandes capos de la droga fue detenido, y los decomisos de drogas se desplomaron por la política gubernamental de
“abrazos y no balazos” que maniató a las fuerzas armadas del país para actuar, lo que dio origen a esa creencia de un pacto secreto entre el presidente y el cartel de Sinaloa, que se acrecentó por las constantes visitas a Badiraguato, Sinaloa, cuna del Chapo Guzmán, en donde, incluso, en una ocasión saludó de manos a doña Consuelo Loera, madre del capo detenido en Estados Unidos, y si es que en realidad había ese pacto secreto, con la detención de Ovidio Guzmán, pues prácticamente se rompe o queda en suspenso, hasta no ver que otras acciones de violencia realizará ese grupo delictivo, porque el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se irá complacido de haber sometido a sus planteamientos a Andrés Manuel López Obrador y de que en poco tiempo el Chapito será extraditado al vecino país del norte donde es requerido, y probablemente hayan otras detenciones de los líderes de otros carteles, pero el real problema de violencia se seguirá viviendo en nuestro país, porque el cartel de Sinaloa, a quien por alguna otra razón, el titular de la Sedena denominó cartel del Pacifico, no se quedará cruzado de brazos y proseguirán desatando la violencia, para demostrar su poderío pese a la detención de Ovidio, quien solamente es parte del engranaje delictivo.
OJITOS
El accidente en la línea tres del metro de la ciudad de México, sirvió para que los opositores al gobierno, como los propios morenistas, simpatizantes de otros aspirantes a la presidencia de la República, se le fueran a la yugular a la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum la chorcolata favorita para ser la candidata a la presidencia de la República, acusándola de ser la responsable directa del choque de trenes que originó un deceso y decenas de lesionados.
En las redes sociales, los seguidores del canciller Marcelo Ebrard y del secretario de Gobernación, Adán Augusto López, dieron rienda suelta a sus acusaciones contra la jefa de gobierno por este nuevo accidente, pretendiendo que con sus publicaciones Claudia caiga del primer lugar en las preferencias ciudadanas al considerarla culpable del accidente en la línea tres del metro, y que el aspirante de su preferencia vaya subiendo en las encuestas, sin tomar en cuenta que están dañando a su gobierno y su propio partido.
Pueden más las ambiciones personales por lograr la candidatura a la presidencia, que la institucionalidad de cuidar a la propia institución gubernamental, así como al partido que los llevó al poder, porque nadie de los que ostentan cargos públicos de primer nivel en el gobierno de la Cuarta Transformación está exentos de no cometer errores, ya que en cualquier momento pueden trastabillar o dar un traspié que no se duda utilizaran los detractores u opositores políticos para intentar exhibirlos públicamente, porque precisamente esa es una de las funciones de la oposición, utilizar los errores de quienes gobiernan para exhibirlos de que no saben gobernar, pero cuando los señalamientos negativos provienen de militantes de un mismo partido que por ser simpatizantes de uno u otro aspirante aprovechan el momento para el golpeteo político en contra de otro de los suyos, hay que tener mucho cuidado, pues estos están actuando mezquinamente para privilegiar sus intereses personales por encima de la institucionalidad gubernamental.
En las redes sociales los seguidores de Marcelo Ebrard, pero sobre todo del secretario de Gobernación, dieron rienda suelta a sus acusaciones en contra de la jefa de Gobierno de la ciudad de México, de quien dijeron que si no sabe gobernar la capital del país, mucho menos sabrá gobernar al país, con lo que sin duda pretenden que caiga del primer lugar en las preferencias ciudadanas de acuerdo a las encuestas que se han realizado para que se posicione el aspirante de su preferencia,
Los funcionarios públicos de primer nivel están expuestos a cometer errores, al igual que pueden cometerlo sus subalternos al actuar en forma negligente, lo que puede propiciar que se presenten problemas que propicien serias consecuencias que obviamente le pegarán directamente en la cabeza al titular de cualquier dependencia, que desde luego será utilizado por sus detractores para exhibirlos.
Los simpatizantes o seguidores del Secretario de Gobernación, deberían estar quietecitos y no emprender una campaña de desprestigio contra Claudia Sheinbaum, para que caiga de las preferencias ciudadanas y este suba en las encuestas, en la lucha por la candidatura presidencial porque como gobierno no los ayuda sino que los perjudica, ya que Adán como funcionario público no está exento de cometer errores, como los hechos de sangre ocurridos en el reclusorio el domingo antepasado en ciudad Juárez, Chihuahua, donde se cometió una masacre, puesto que ese sistema penitenciario depende de la secretaría de Gobernación.
Los hechos de sangre perpetrado la semana antepasada en uno de los reclusorios federales de ciudad Juárez, Chihuahua, por la fuga de Ernesto Alberto Piñón de la Cruz, (A) El Neto, quien fuera líder del grupo delictivo los Mexicles, y que posteriormente fue abatido por las fuerzas públicas, podría ser un detonador en contra del secretario de Gobernación, ya que se exhibió la podredumbre y corrupción que se vive en el sistema carcelario, donde no hay orden, pues hay reos de alta peligrosidad que viven como reyes en sus celdas con todas las comodidades habidas y por haber, y mantienen el control de dichos penales, por eso los seguidores, que se desgarran las vestiduras porque quieren que el candidato a la presidencia de la República por Morena sea Adán Augusto López, deberían ser cautos y prudentes, porque como funcionario no está exento de cometer errores que puede ser utilizado por sus detractores para exhibirlo públicamente.
Si los seguidores del secretario de Gobernación, creen que con la campaña de desprestigio en contra de la jefa de Gobierno de la ciudad de México, están posicionando a su candidato, pues se están equivocando, pues están sumiendo en el desprestigio al propio gobierno de la Cuarta Transformación, que les va a impactar negativamente durante el proceso electoral, por eso, al ver la gravedad del asunto con la línea tres del metro, los gobernadores de Morena no dudaron en lanzar un desplegado para apoyar a la jefa de gobierno de la ciudad de México ante la embestida que se había iniciado en su contra y que se frenó tantito por la visita de los mandatarios extranjeros, pero que arreciará en cuanto estos se marchen del país, porque ciertamente como gobernante de la ciudad de México, Claudia Sheinbaum, debe responder por este nuevo accidente en el metro.
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