MAS DE LO MISMO

  Cuando se esperaba que el arribo del nuevo dirigente estatal interino  del Partido Revolucionario Institucional (PRI)  sirviera para calmar los ánimos de quienes aspiran a ocupar por cuatro años la dirigencia estatal, esto no ha sido así, pues los golpes bajos y las intrigas palaciegas están a la orden del día, ya que el propio chiapaneco José Antonio Aguilar Bodegas, fue descalificado como un buen arbitro desde el mismo momento en que llegó, por lo que se augura que la elección interna de los priistas terminará en los tribunales electorales.    Los priistas cuestionan que José Antonio Aguilar Bodegas es más de lo mismo, ya que desde que fue nombrado dirigente interino del PRI en Tabasco, toda la estructura que manejaba el anterior dirigente, Francisco Herrera León, uno de los mayores responsables de que el tricolor perdiera desde la gubernatura, el Congreso local y la mayoría de las presidencias municipales en julio de 2012, está intacta, no ha sufrido ninguna modificación, desde el secretario particular  que tenía Pancho que es el mismo que utiliza Bodegas, y todos sus personeros siguen ahí,  de tal manera que de nada sirvió el cambio, porque el ex-dirigente (Pancho botella) sigue manejando los hilos conductores de ese partido, y detrás de él cual se encuentra un ex-gobernador (Andrade) a quien le pidieron que sacara las manos del proceso interno del PRI en Tabasco y que al ser pillado socavando la propia estructura priista para su beneficio, le enviaron un cruento mensaje de que lo están investigando en Canadá. Los priistas también cuestionan, que no solamente se venció el plazo para que fuera relevado en la dirigencia estatal,  Francisco Herrera, y como secretaria general, Liliana Madrigal, sino que de igual manera en las demás secretarias también debieron de darse los cambios, de tal manera que hay una dirigencia estatal priistas manca y coja, pues solamente se nombró a Aguilar Bodegas como dirigente estatal interino, pero no hay secretaría general, lo cual es una irregularidad, pero lo más delicado, es que el propio Bodegas es rehén de Francisco Herrera, pues toda la estructura de éste último,  está intacta, no se ha hecho ningún cambio, porque precisamente al desconocer cómo están conformados los grupos al interior del priismo, el chiapaneco, ya se entregó en los brazos del mismo grupo que fue responsable de la derrota electoral en Tabasco. De hecho, hay aspirantes a la dirigencia estatal del PRI, como Pedro Gutiérrez Gutiérrez, que han descalificado la nula actuación del propio Comité Ejecutivo Nacional del PRI, que incumplió en su responsabilidad de emitir la convocatoria de renovación,  en tiempo y forma,  para que iniciara de manera formal el proceso interno de renovación de la dirigencia estatal, lo que ha caldeado aún más los ánimos entre los priistas, que todavía se niegan a vivir de su cruel realidad, de que ya no son gobierno, y que algunos desde la oscuridad, pretenden seguir pulverizando lo que queda del priismo en Tabasco, porque hay otros que  ya se acomodaron en el nuevo gobierno, y esos no tiene boleto de retorno al ex-partidazo. Por ninguna parte se ven las señales de que los priistas, vayan a anteponer sus intereses personales o de grupos en busca de la unidad, de tal manera, que es prácticamente imposible que se logre una candidatura de unidad a la dirigencia estatal del PRI, porque hay grupos antagónicos en sí, que están enfrentados desde antes de las elecciones constitucionales de julio de 2012, y no se ve que exista un verdadero arbitro que pueda sentarlos para dirimir sus diferencias. Por ejemplo, es inconcebible que el grupo que encabeza el candidato perdedor de la gubernatura, Jesús Alí de la Torre, que fue impuesto como candidato a la gubernatura desde el centro del país, ahora anden pregonando entre sus seguidores que no permitirán una imposición de la capital del país en la dirigencia estatal del PRI, porque no pasará, cuando Chucho fue precisamente producto de ese dedazo que ahora cuestiona, de tal manera que si hay algún grupo al que no deben dejar que se apodere del tricolor en Tabasco, es precisamente al de Jesús Alí, que encarna la soberbia y la traición, que fueron factores que incidieron para que no ganara la gubernatura. Prácticamente, el dirigente estatal interino el PRI, José Antonio Aguilar Bodegas, está solo, enjaulado y a merced de los buitres que siguen incrustados en la nómina partidista, por lo que si quiere salir bien librado de su encomienda en la entidad, debe realizar cambios en la dirigencia, debe renovar las secretarias operativas, porque aun, cuando trajera todo el interés de realizar un proceso interno democrático, hay fuerzas al interior que le meterán de zancadillazos a Aguilar Bodegas para que reviente y fracase en el proceso de elección del nuevo dirigente estatal. Hay priistas que no conciben que solamente se haya cambiado al dirigente estatal, de que la secretaría general esté acéfala, como si no interesara la segunda posición en la estructura priista, y que en las secretarias operativas como la de Organización, siga operando la misma gente de Francisco Herrera, lo que es, igual a lo mismo, porque se fue Pancho, pero quedaron sus personeros que vigilan todos los pasos de Aguilar Bodegas, quien podrá realizar acuerdos políticos con los aspirantes, pero que le será desbaratado por los propios intereses que se siguen moviendo en la estructura estatal de ese partido. Hay priistas que recomiendan a Aguilar Bodegas, antes de meterse de lleno al proceso de elección del dirigente estatal, que cambie a toda la estructura que le dejó incrustado Francisco Herrera, que nombre interinamente una secretaria general, porque ese cargo no puede permanecer acéfalo, que jale a priistas de los diferentes grupos que realmente lleguen a ayudarlo para intentar reunificar al priismo, porque en las actuales condiciones, se vive un enfrentamiento subterráneo que los mantiene fragmentados, amén de que se encuentran en la orfandad política, precisamente, por la falta de un liderazgo que los convoque a la unidad, si es que quieren volver al poder, como ya pasó a nivel federal. En el relevo de la dirigencia del PRI en Tabasco se ha visto mucho desaseo político y legal, que algunos aspirantes vienen cuestionando, como es el hecho de que una vez que el Consejo Político Estatal seleccionó el pasado uno de junio el método bajo el cual se elegirá a la nueva dirigencia que será por medio de asamblea de consejeros, la dirigencia nacional que tenía 30 días para emitir la convocatoria, previa sanción al acuerdo del CPE, no realizó ninguna de las dos cosas, ni la sancionó, ni emitió la convocatoria,  argumentando que por haber elecciones en 15 estados el siete de julio se difería, pero esa prórroga esta fuera de las normas internas, de tal manera que esto puede dar pie para que en su momento, si no les conviene, se impugne el nombramiento del nuevo dirigente. Ante las circunstancias de divisionismo que existe al interior del priismo tabasqueño, y por el brutal recibimiento que le hicieron a Aguilar Bodegas, recordándole su pasado tenebroso en su natal Chiapas,  todos los indicios apuntan,  a que una vez que se nombre al nuevo dirigente estatal del PRI, y más si entra con calzador será impugnado ante los tribunales electorales para echar abajo el procedimiento viciado de origen. Para los que anotan; hasta ahora, tres chiapanecos han sido dirigentes estatales del PRI; Juan José Rodríguez Prats, Adrián Hernández Balboa y ahora José Antonio Aguilar Bodegas, vaya aguante de los priistas tabasqueños, que sin chistar aceptaron que un chiapaneco, venga a querer meter orden, quizás por eso también le sacaron su historial negro a quema ropa, para que Aguilar Bodegas entienda que los priistas no se andan por las ramas.                                    

 OJITOS
Todo indica que el ex-subsecretario de Administración de la Secretaría Administración y Finanzas del gobierno granierista, y actual presidente municipal de Tenosique, Carlos Alberto Vega Celorio, tiene los días contados al frente del ayuntamiento, ya que si las cosas caminan correctamente a como se tiene que hacer,  la Comisión de Justicia y Gran Jurado del Congreso local, que encabeza el legislador Rafael Acosta León, aprobará en Comisiones el documento que contempla el juicio político para desaforarlo y de esta forma pueda enfrentar la acción de la justicia. El ex-subsecretario de Administración es pieza clave en el derroche de los recursos públicos de la administración granierista. El Ojo Visor, que en todo está, ha señalado con precisión que Beto Vega tuvo que ver en todas las adquisiciones que realizó el gobierno granierista, desde el alquiler de las camionetas blindadas, hasta las ventas de los aviones y avionetas del gobierno estatal que transformados en chatarra, fueron vendidos como tal, cuando su reparación era costeable. Vendieron los aviones del gobierno  para posteriormente rentar aviones y helicópteros a precios millonarios. Cuando caiga de la presidencia municipal, Beto Vega, el pueblo de Tenosique hará fiesta, porque tanto él como su esposa tratan con la punta del pie a las personas que acuden en busca de apoyos a la presidencia municipal  o al DIF-municipal, encontrando solamente malos tratos. El juicio político para Beto Vega será el parteaguas para que también sea depuesto de su cargo el inepto y corrupto alcalde de Macuspana (de origen veracruzano), Víctor Manuel González Valerio, que en tan solo siete meses ha sumido en el caos el ayuntamiento.