Jacinto López Cruz
Ante la brutal represión y el uso de la
fuerza pública para intentar violentar el proceso de elección de delegados
municipales, aunados a la violación de la Ley Orgánica Municipal, de la Ley
Electoral del estado y otras disposiciones legales, la sociedad civil de
Macuspana ha lanzado una convocatoria a todos los macuspanense para marchar
este viernes en contra de las decisiones arbitrarias del presidente municipal,
Víctor Manuel González Valerio y del secretario del ayuntamiento, Juan Alvarez
Carrillo, quien desde ahora está trabajando para ser el próximo candidato del
Partido de la Revolución Democrática (PRD) a la alcaldía, cuando los resultados
en tres meses de gobierno son totalmente pésimos.
Enfrentado a cinco regidores del
ayuntamiento, Moisés Moscoso, Walter Solano Morales (Partido Revolucionario
Institucional), Emilia Gómez Esteban
(Partido del Trabajo), Virgilio Gerónimo Montero (Partido de la Revolución
Democrática) y Luís Alberto Correa (Partido Movimiento Ciudadano), los tres
últimos integrantes de la coalición que postuló al mismo Víctor Manuel González
Valerio como presidente municipal, hoy el ayuntamiento de Macuspana vive uno de
sus peores momentos, pues a pesar de que desde la instalación misma del cabildo
municipal estos regidores le dijeron al alcalde que el procedimiento estaba
viciado de origen y que había que corregirlo para que tuviera legalidad, no le
interesó violentar la Ley Orgánica municipal por lo que BBVA Bancomer le
mantiene congelada desde hace como un mes la principal cuenta que maneja el
ayuntamiento en donde le han depositado recursos federales y estatales que
hasta la presente fecha no puede disponer, porque al mal integrar el acta de
cabildo, el banco desconoce la personalidad jurídica del propio alcalde para
poder disponer de los recursos públicos que siguen inamovibles, por más que
Valerio lo quiera negar.
Pero la gota que derramó el vaso para
que la ciudadanía Macuspanense se decidiera a organizarse para marchar el
próximo viernes por las principales calles de la cabecera municipal para exigir
la renuncia de Víctor Manuel González Valerio, han sido dos cosas, primero, que
las principales calles de Macuspana están anegadas en aguas sucias y
pestilentes sin que reciba inmediata atención, mientras que en las comunidades no se ha movido un
solo dedo para cumplir mínimamente con sus requerimientos planteados en
campaña, ya que el alcalde vocifera que no cuenta con un solo peso, que el
gobierno del estado no le ha depositado los recursos económicos para comenzar a
trabajar y que por lo tanto el responsable de que el municipio esté en la
inanición, en quiebra, en bancarrota es
el gobernador del estado, Arturo Núñez Jiménez, quien no le ordena al
secretario de Finanzas les entregue los recursos públicos para ponerse a
trabajar, cuando en realidad ha sido lo contrario, sí ha recibido las partidas
presupuestales, y lo segundo, fue la forma soez y arbitraria, como lanzó la
convocatoria para elegir delegados municipales,
firmado solamente por el alcalde y su secretario del ayuntamiento, bajo la total oposición de los cinco
regidores que se negaron a firmar el acta de cabildo porque dicha convocatoria
violaba diversas disposiciones legales, pero como Valerio ha sostenido
públicamente que en Macuspana la ley es él y nadie más, no le interesó la
opinión de quienes llama sus detractores, sus enemigos políticos, por lo que ahora
prácticamente enfrentará una revuelta de la población tumbapato que en tan solo
tres meses de distancia está asqueado de la ola de corrupción que está
prohijando en el ayuntamiento el veracruzano, porque mientras aduce no hay ni
un solo peso para la obra social, si tuvo dinero para organizar el carnaval
donde se gastaron más de doce millones de pesos, como también, sí hubo dinero
para comprar dos camiones chatarras en más de 382 mil pesos cada uno, solo para
complacer a la señora Leticia Potenciano, la presidenta del DIF municipal, y
son chatarras porque tienen más de diez años de uso que ya no pagan tenencia y
que supuestamente fueron adquiridos a precio de ganga, cuando si en realidad
quisieran hacer bien las cosas, debieron comprar un camión de pasaje nuevecito
en vez de porquerías que en el primer viaje se quedaran botados.
El ayuntamiento de Macuspana vive uno
sus peores momentos, ya que la convocatoria para elegir delegados municipales
al violentar diversas disposiciones legales, no solamente fue objetado por los
cinco regidores que se oponen a las atrocidades de Valerio, quien incluso los
amenazó de que se atuvieran a las consecuencias porque si tenían familiares que
los cuidarán, (todo un gánster el veracruzano), sino que varias personas
interesadas en participar al sentir sus derechos violados interpusieron la
semana pasada demandas ante la Fiscalía de Delitos Electorales de la
Procuraduría General de la República y la Procuraduría General de Justicia del
estado, por presuntos delitos electorales en contra del edil Víctor Manuel
González Valerio, y de su secretario del ayuntamiento, Juan Álvarez Carrillo,
como en contra de un grupo de regidores del cabildo, quienes abusando de su
poder, firmaron la convocatoria para la elección de delegados Municipales en
forma amañada, ya que uno de los requisitos establecidos es que el candidato a
delegado tenía que presentar su solicitud firmado por 50 ciudadanos, quienes
además estaban obligados a entregar copia de su credencial de elector para
avalar sus firmar, lo cual es una clara violación a la ley electoral, al violar
el secreto del voto, pues es indudable que el edil al saber quiénes apoyan a
determinado candidato, puede mandar a coaccionarlo o intimidarlo para que
cambie su sentido del voto.
La denuncia interpuesta por los
ciudadanos macuspanenses en contra del presidente Municipal, y el secretario
del Ayuntamiento, al violentar el principio de elegibilidad que marca la Ley
Orgánica Municipal y la propia Constitución del Estado de Tabasco, puso furioso
a Valerio y su testaferro, Juan Alvarez, por lo que éste último al citar a los
candidatos a delegados y jefes de sector opositores al PRD en pleno viernes santo para
que acudieran a firmar el documento del pacto de civilidad para no impugnar las
elecciones, rodeó el centro cívico con la policía municipal a manera de
intimidación en contra de ellos y hasta amenazó a varios priistas con meterlos
a la cárcel, entre estos a Víctor Solís Vadillo, que estaba asesorando a varios
aspirantes, por el simple hecho que éste le recriminó la forma intimidatoria de
usar a la fuerza pública y de violentar
la ley, además de que estaban firmando un documento sin que el aspirante
recibiera una copia de la misma, lo que finalmente originó que sacaran del
inmueble a quienes estaban asesorando.
La marcha en contra del presidente
municipal de Macuspana, Víctor Manuel Gonzalez Valerio está calando hondo entre
la población, no solamente porque está
violentando las leyes y cometiendo actos de corrupción, sino también, porque al
formar parte del clan del legislador federal, Juan Manuel Fócil Pérez, ha
recibido la orden de que ningún integrante de Morena que quiera participar en
el proceso de elección de delegados municipales se le deje inscribir, pues la
idea es borrar completamente de Macuspana todo lo que huela a Andrés Manuel
López Obrador, pero ese es otro de los graves errores del edil de origen
veracruzano que está creído que ganó por su “popularidad” cuando si hay un
municipio que ganó el PRD en el pasado proceso electoral de julio de 2012, fue
por la enorme fuerza política de AMLO.
En Tabasco, Andrés Manuel López Obrador
hizo ganar a los diputados federales, a los alcaldes y diputados locales, como
también logró aportarle una gran cantidad de votos al actual gobernador Arturo
Núñez, casi todos, por no decir que todos han reconocido públicamente que la
fuerza política de AMLO entre los tabasqueños fue vital para que ganaran, salvo
Víctor Manuel González Valerio, quien se ha negado a reconocer que ganó en la
tierra de Andrés Manuel por la fuerza política de éste, al grado de que ahora
combate todo lo que huela a Morena, pero en el pecado llevará la penitencia,
por lo que hasta morenistas se sumaran a la marcha.
Si hay algún presidente municipal que
está condenado a no terminar su trienio ese es Valerio, quien este viernes
recibirá una sopa de su propio chocolate porque los tumbapatos están hartos no
solo de su ineptitud, sino de su corrupción, tal como lo denunciaron en rueda
de prensa la semana pasada los regidores, Emilia Gómez Esteban (PT), Virgilio Gerónimo Montero (PRD), Luis Alberto
Correa (MC), Moisés Moscoso y Walter
Morales (PRI), al precisar "vinieron con la clara intención de perpetrar
un gran saqueo al ayuntamiento”. “Perpetraron otro atraco al presupuesto al
presentarnos que avaláramos una inversión arriba de los 350 mil pesos en la
rehabilitación del cárcamo de la colonia El Castaño, obra que checamos y no
requiere más que unas tres vigas de fierro y una malla donde irá sentada la
bomba, lo que haría un soldador, pero violando normas y la ley orgánica de nuevo
SAPAM dice que tal obra ya se hizo”, es decir primero hicieron la supuesta obra
y posteriormente querían que el pleno del cabildo se los aprobara.
OJITOS
Otro que volvió a las andadas es el
actual presidente municipal de Jonuta, el priista José Felipe Torres. Hace
varios años fue depuesto del cargo por actos de corrupción, y si no fue a la
cárcel es porque se arrodilló pidiendo clemencia, pero no terminó de aprender las lecciones del
pasado; apenas llegó al ayuntamiento compró más de cien cabezas de ganado que
tiene pastando en un rancho que limita con los municipios de Balancán y Jonuta.
Ver para creer. Pronto los detalles.
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