La advertencia de que el Instituto de Seguridad Social del Estado de Tabasco (ISSET) es una bomba de tiempo que puede colapsar por el boquete financiero que tiene de diez mil millones de pesos, más la manifestación que encabeza en la ciudad de México el dirigente sindical Humberto Ramón Chaires para exigir que las jubilaciones de los trabajadores sean al cien por ciento de sus salarios, debió poner de mal humor al gobernador florero de Tabasco, Carlos Manuel Merino Campos, quien estalló en contra del director de esta institución, Fernando Enrique Mayans Canabal, y que si la institución no funciona ya no debería estar ahí.
El problema económico del ISSET no es nuevo, se viene arrastrando desde sexenios anteriores pues lo utilizaron como caja chica, desviando recursos económicos para otros fines, al grado que desde el gobierno de Roberto Madrazo Pintado, se advirtió que podría paralizarse si no le inyectaban recursos económicos para poder cumplir con las prestaciones económicas de los trabajadores, por eso no es novedoso, ni descubrió el agua tibia Fernando Mayans Canabal, al haber advertido en el noticiero Telereportaje del colapso financiero que está a punto de darse y que no permite otorgarle a los afiliados créditos a corto plazo, ni mucho menos pagarle a los trabajadores que ya se jubilaron, si el gobierno estatal no le inyecta de manera urgente recursos económicos.
El problema económico que viene arrastrando al ISSET, por el cual se adujo que tenía y sigue tiene grandes carencias para que puede funcionar al cien por ciento por la falta de recursos económicos, propició que el gobierno de Arturo Núñez, pese a la inconformidad de los trabajadores, modificará la ley del ISSET, que entre otras cosas modificó las cuotas que aportan los trabajadores, pues del ocho por ciento pasó al 16 por ciento, como la edad y la antigüedad que deben tener los trabajadores para poder jubilarse, lo que propició que un grupo de legisladores opositores a ese gobierno, interpusieran una controversia constitucional ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación para revertir las modificaciones hechas a la ley porque perjudicaban a la base trabajadora, que hasta la presente fecha no se ha resuelto en el pleno del máximo órgano impartidor de justicia, lo que ha provocado una serie de dilemas, pues hay trabajadores que aceptaron la nueva ley, como también hay trabajadores que prefirieron quedarse bajo el régimen anterior de la vieja ley lo que ha causado una serie de confusiones y problemas.
Precisamente porque hay trabajadores que se quedaron bajo el anterior régimen y otros que están en la nueva ley, el ISSET el director general se encuentra entrampado porque se niega a otorgar el cien por ciento de las jubilaciones a los trabajadores que cumplieron su ciclo de labores, principal demanda que encabezan varios sindicatos cuyos afiliados entregan sus cuotas a esta institución , que están agrupados en la Coalición Por Tabasco que dirige Humberto Ramón Chairez, quienes están en la ciudad de México, demandando ser escuchados por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, porque en el estado, el gobierno que encabeza Carlos Manuel Merino Campos que ha resultado ser un verdadero florero, no tuvo la capacidad de dar una respuesta convincente a esos sindicatos, y solamente les pretendieron dar vueltas y vueltas aplicando la famosa política del trompo del cual se ha vuelto especialista el secretario de Gobierno, Guillermo del Rivero, porque a todas las cosas le da vueltas y vueltas, sin darles una solución, y eso es precisamente lo que denunció Chairez, que este funcionario no funciona porque pretendía darle largas al asunto, con un dizque análisis de la situación, por lo que optaron por viajar a la ciudad de México para protestar y exigir que los trabajadores sean jubilados al cien por ciento.
La falta de respuesta del gobierno estatal, que provocó que la Coalición por Tabasco este plantado en el zocalo de la ciudad de México, también le pega al aspirante presidencial, Adán Augusto López Hernández, que anda por el país ofreciendo soluciones a los problemas porque según él tiene la capacidad para resolverlos, pero es patético que durante el gobierno que encabezó en Tabasco no supo o no quiso darle solución al conflicto del ISSET que ahora se agrava, porque solamente le dan vueltas al asunto, porque lo que necesita la dependencia para cumplir con las prestaciones de los trabajadores jubilados y activos, es dinero y más dinero, diez mil millones de pesos según dijo Fernando Enrique Mayans Canabal.
Es claro que el gobernador se molestó públicamente porque Mayans Canabal ventiló en el noticiero Telereportaje, la falta de liquidez financiera en el ISSET, porque hay dependencias de gobierno e instituciones educativas que no le entregan sus aportaciones económicas que es producto del descuento que le hacen a los trabajadores, que es una ilegalidad por parte de las dependencias retener dinero ajeno descontado a los trabajadores, lo que ha propiciado que Instituto de Seguridad no cuenten con los recursos económicos para cumplir con todas las prestaciones de ley, por eso, cuando le preguntaron si era cierto que podría haber un colapso del ISSET, con el mayor de los desparpajos respondió que: “Si el asunto es tan catastrófico yo no estaría ahí; si la cosa es tan terrible, ¿que haces ahí?, en referencia a Fernando, pero solo de su perorata no pasará Merino, porque no se atreve a pedirle la renuncia a quien no puso en el cargo, pues es claro que Mayans llegó al ISSET por una decisión del ahora aspirante presidencial Adán Augusto López, y si este no da su venia, simplemente Merino se quedará con su coraje hacia Mayans Canabal, quien por otra parte, no ventiló nada nuevo, es un viejo problema que vive el ISSET porque el fondo de pensiones, la gran bolsa que debería tener millones de pesos para resolver todas las prestaciones laborales de los trabajadores, desde hace varios sexenios le vinieron metiendo las manos para sustraerle los recursos económicos para otros fines, y si a eso se le agrega que hay dependencias, y centros educativos que vienen arrastrando viejas deudas con esa institución, porque dejaron de entregar las cuotas de los trabajadores, la situación se torna difícil en el ISSET, aunque el gobernador lo desdeñe y dice que no pasa nada, que ha entregado dinero, que todo está bien, y que si Mayans no puede, que deje de sufrir y que renuncie, pero este no lo hará por si solo si Merino no lo presiona, pero resulta queel gobernador aparte de que no tiene valor, está atado de pies y manos para realizar cambios en su gabinete, por eso en vez de renunciarlo le pide al director general del ISSET que renuncie y deje de sufrir, porque no depende de él, si Mayans se va o se queda, por eso el otro se ríe de lo que hizo.
Por otra parte, trabajadores de esta institución hacen la siguiente denuncia: “Muy ocupado anda el director general del ISSET, Fernando Mayans Canabal, construyendo su enésima candidatura a la gubernatura del estado y como ahora la tiene más que difícil, son como 20 aspirantes en la búsqueda del mismo cargo, le urgen dos cosas: dinero y reflectores. Aunque ahora, hace responsable a Luis Romeo Gurria Gurria de que los ingresos (Recursos económicos) no le caen de las dependencias por su tardanza en los pagos.
Es bien sabido que el ex presidente de la Comisión de Seguridad Social del Senado de la República es muy dado a la alharaca y la estridencia -cabría recomendarle lo que alguna vez recetó Andrés Manuel López Obrador a Vicente Fox, el célebre “¡Cállate chachalaca!”- y en entrevista reciente lanzó mandobles contra miembros del gobierno del estado por la falta de recursos que de sobra sabe que debe proporcionar la Secretaría de Finanzas y en repetidas ocasiones se ha quejado como forma de llamar la atención a un asunto, las cuotas y la necesidad de pagar a jubilados y pensionados que también sabe está en manos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que debe analizar la nueva ley del instituto.
¿Entonces para qué tantos brincos estando el suelo parejo? Simple, Fernando Mayans requiere recursos para costear la campaña guajira hacia la gubernatura del estado. ¿No se habrá enterado que las mismas aspiraciones y mucho camino recorrido llevan Javier May Rodríguez, Jaime Lastra Bastar y su primo César Raúl Ojeda Zubieta?, y eso si en Movimiento de Regeneración Nacional no se impone la cuota de género y en tal caso llevarían mano Rosalinda López Hernández y Yolanda Osuna Huerta.
El asunto de la potencial quiebra financiera del Instituto de Seguridad Social del Estado de Tabasco es de larga data y tiene mucho mar de fondo. Lucio Galileo Lastra Escudero, secretario de Salud en el régimen de Roberto Madrazo, advertía ya en el último lustro del siglo pasado de esa posibilidad y de la urgencia de actualizar el cobro de cuotas para evitarlo. Llegó el gobierno de Manuel Andrade y pudo tomarse una decisión de gran calado, pero no se hizo y la bola de nieve siguió creciendo.
Entre 1986 y 2010 se practicaron ocho estudios actuariales, que se consideran la única herramienta aceptada para la toma de decisiones sobre esquemas de seguridad social y prestaciones contingentes. Mientras en 1986 se determinó debían constituirse las reservas técnicas para el pago de prestaciones contingentes, pensiones, seguros, prestaciones médicas, para 1991 se estableció el fondo contingente que debía disponer de una bolsa de 12 millones de pesos, y siete años más tarde se debían destinar 63 millones para el pago de pensiones. Ya para 2004 se recomendó se debía de contar con cuotas y aportaciones superiores al 50 por ciento del sueldo base de los trabajadores activos para hacer frente a pagos de pensiones y jubilaciones y para 2009 ascendió a 78.48 por ciento del sueldo base la cantidad de cuotas y aportaciones para dar sustentabilidad al instituto.
Un año más tarde, en 2010, ya se debía cotizar con 103.21 por ciento del sueldo base del trabajador y contar con más de 127 millones en el fondo de pensiones. Una quiebra anunciada para lo cual no se tomaron medidas durante seis décadas en razón de que el ISSET fue creado en 1960.
El punto más crítico se registró en 2015, porque el gobierno de Tabasco aportó 301 millones de pesos para pensiones, al margen de los 220 millones de subsidio de la Federación, año en que el importe del subsidio estatal alcanzaría cerca de 900 millones y tres años más tarde se estimaba fuera de alrededor de mil 700 millones.
A todo aquel que le presta oídos Mayans Canabal reclama amargamente al gobierno estatal pero sobre todo a Luis Romeo Gurria Gurria, actual secretario de Finanzas que le ha hecho una bomba de tiempo que estallará a más tardar en octubre próximo. Lo ha dicho a miembros de sindicatos que acuden a visitarlo e indefectiblemente se queja de la falta de aportaciones y adeudos de dependencias.
Y es evidente que además de la falta de recursos el ISSET adolece de una mala administración.
La Doctora de hemodiálisis de aquí del Hospital de la ceiba es su querer. nos sacrifican a nosotros médicos, especialistas, enfermeras, administrativos, intendentes, incluso a los pacientes a no otorgar los medicamentos básicos.
Ciertamente lo hace y tiene mucha gente que utiliza en su campaña trabajando en puestos claves”, hasta ahí la denuncia que desde luego cala hondo.
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