PUGNAS INTERNAS EN EL PRD

Lo que parecía miel sobre hojuelas al interior del Partido de la Revolución Democrática (PRD) luego de que su Consejo Político Estatal acordara el pasado sábado establecer alianzas electorales con otros partidos políticos con miras a las elecciones constitucionales de 2018, en un abrir y cerrar de ojos ha entrado en una confrontación, por la renovación de la dirigencia estatal a cargo del legislador federal, Candelario Pérez Alvarado, perteneciente al grupo focilista que al advertir lo que venía, ya había llamado a un reagrupamiento a todos sus integrantes. Ayer, el secretario general del Sol Azteca, José de la Cruz Rueda Hernández, perteneciente a la tribu Nueva Izquierda que en el estado encabeza el secretario de Comunicaciones y Transportes del gobierno estatal, Agustín Silva Vidal, inicio un procedimiento de remoción del dirigente estatal, Candelario Pérez Alvarado, ante la Comisión Jurisdiccional del IX Consejo Estatal del Sol Azteca, instalado apenas el pasado sábado durante la reunión del Consejo Político Estatal, siendo admitido dicha queja por ese órgano interno que estableció un plazo de 72 horas para que las partes notificadas presenten sus pruebas de cargos y descargos en relación a las acusaciones vertidas para la remoción. De los cinco integrantes de la Comisión Jurisdiccional del IX Consejo Estatal, firman la cédula de notificación a Candelario Pérez, José Trinidad Noriega Pérez en su calidad de presidente; Elsy Lidia Izquierdo Morales, vicepresidente, y José Antonio Hernández Hernández en su calidad de secretario, mientras que se abstuvieron Karolina Pech Frías y Julio Alonso Manzano Rojas, ambos integrantes de dicho organismo. A la petición de destitución de Candelario Pérez integrante de la tribu ADN que a nivel nacional encabeza Héctor Bautista y en el estado, el legislador local Juan Manuel Fócil, se unieron prácticamente la mayoría de los integrantes de Nueva Izquierda como Agustín Silva, José Antonio de la Vega, aspirante a la candidatura a la gubernatura, la legisladora federal, Aracely Madrigal, Francisco Sánchez Ramos, Johana Sánchez y algunos dirigentes municipales que ya requieren el cambio de dirigente estatal, ante las elecciones federal, estatal y municipal que ya está en proceso. Apenas el pasado lunes el Ojo Visor, que en todo está, bajo el titulo reagrupamiento focilista había revelado que Juan Manuel Fócil previendo lo que venía se reunió con su tribu para cerrar filas y trazar el camino que deben de seguir. Esto es parte de lo escrito el pasado lunes: “Cuando parecía que el grupo de los focilistas había decidido ceder terreno y propiciar que un militante perredista que reuniera el consenso de todos los grupos se convirtiera en el dirigente estatal del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en sustitución de Candelario Pérez Alvarado, algo pasó, que de nueva cuenta decidieron cerrar filas para volverse a buscar la dirigencia para uno de los suyos, lo que les daría mano para decidir las candidaturas a la alcaldía como ya lo hicieron en el pasado. Si bien es cierto que desde hace muchos años Juan Manuel Fócil y Candelario Pérez Alvarado han venido trabajando de la mano, haciendo el uno dos, lo que les ha permitido ir consolidado su tribu política, con cargos públicos, como presidencias municipales, diputaciones locales, y diputaciones federales, siendo el grupo más fuerte al interior del PRD, algo pasó, algo sucedió, que motivó que Juan Manuel Fócil Pérez se reuniera en privado con su alfil Candelario Pérez Alvarado, para analizar la ruta a seguir en el caso de la sucesión gubernamental en el 2018 y la alcaldía de Centro que ambos están buscando, de tal manera que acordaron, que nada, ni nadie los va a dividir en lo que llaman sus legítimas aspiraciones de buscar los cargos de elección popular, volviendo a cerrar filas para dejar en claro, que seguirán trabajando en torno a sus aspiraciones, y la de sus seguidores, y que nada, ni nadie, hará que se fragmente el grupo focilista. De la misma forma, muy en corto, dejaron establecido que si bien, habían mostrado su “buena” disposición para que un perredista de viejo cuño, que tuviera los consensos de los diferentes grupos, fuera ungido por el consejo político como dirigente estatal, una vez que Candelario Pérez decidiera renunciar a dicha dirigencia en su búsqueda por la alcaldía de Centro, algo pasó, que el grupo focilista cambió bruscamente de parecer, dando un giro de 180 grados, por lo que ahora ya delinearon que una vez llegado el momento de la renovación de la dirigencia estatal que lo pueden llevar hasta finales de diciembre, van a luchar, incluso consensuando con consejeros de otros grupos para que un focilista quede al frente de la dirigencia estatal, con el compromiso de que los acuerdos que suscriban están dispuestos a cumplirlo, pero que no dejarán pasar a nadie de Nueva Izquierda que es la corriente que en el estado encabeza, el secretario de Comunicaciones y Transportes del gobierno estatal, Agustín Silva Vidal, mejor conocido como el Duende de Guapinol. Sin duda que esta nueva lucha subterránea que ha llevado a Juan Manuel Fócil a desenterrar el hacha de guerra al interior del PRD, va circunscrita, o gira en torno a la sucesión gubernamental, porque no hay duda que de algo se enteró que llevó a reunirse muy en privado con Candelario para tomar acuerdos y caminar en una sola directriz sin permitir que los fragmenten”. La acusación del secretario general en contra de Candelario Pérez Alvarado para exigir su destitución estriba en que parte de su obligación como presidente es convocar cada tres meses al Consejo Político Estatal del PRD, pero resulta que desde la anulación de la elección de presidente municipal de Centro ocurrido en 2015, no había convocado al máximo órgano deliberativo de ese partido, y que si bien el pasado sábado 14 se reunieron fue a exigencia de 98 consejeros estatales que firmaron la solicitud a la mesa de dicho consejo por lo cual se pudo realizar dicha reunión, a la que asistieron 167 consejeros de los cuales, solamente 39 consejeros fueron de ADN o sea del grupo focilista en Tabasco. De la misma manera, se le acusa de que siendo su obligación como dirigente estatal del PRD, presentar el presupuesto de ingresos y egresos de cada año al Consejo Político Estatal para su aprobación, así como rendir el ejercicio anual de gastos ante ese organismo, tampoco lo ha realizado desde 2015, por lo que ha caído en graves omisiones a su responsabilidad, por lo que no se sabe en que ha invertido los recursos de las prerrogativas y las cuotas económicas que aportan los militante del PRD que están en cargos públicos o en cargos de elección popular. De acuerdo al procedimiento a seguir ante esta acusación de destitución del dirigente estatal, la Comisión Jurisdiccional del Séptimo Pleno Extraordinario del IX consejo Extraordinario si encuentra omisiones en base al reglamento, está obligado a emitir una sentencia de destitución y la mesa del Consejo Político Estatal podrá designar a un dirigente estatal interino en la próxima reunión del Consejo Político Estatal que hasta donde se sabe cuenta con mayoría el grupo focilista, al menos que en todo este tiempo haya cambiado la correlación de fuerzas internas en dicho consejo. Por su parte, el todavía dirigente estatal del PRD, sostuvo que desconoce la cédula de notificación, porque no lo ha recibido, pero que no se distraerá en otros asuntos, porque está metido en el tema de la tarifa de la Comisión Federal de Electricidad, lamentando que haya “compañeros” que lejos de impulsar la construcción del partido, no ayudan en lograr esa unidad, sino que enredan las cosas, justo ahora que está en marcha el proceso electoral a donde tienen que llegar fortalecidos. Recordó que su periodo al frente de la dirigencia estatal como de todos los que integran el Comité Ejecutivo Estatal del PRD vence el 27 de octubre de este año, y que en el caso del Consejo Político Estatal su periodo concluyó el pasado 4 de octubre, y que solamente está prorrogada por el Consejo Nacional, pero que los perredistas están pasando que a partir del mandato de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, el próximo fin de semana, la dirigencia nacional del Sol Azteca debe emitir la convocatoria para renovar la dirigencia nacional, también mandata dar cumplimiento a un resolutivo del mes de agosto para renovar las dirigencias estatales, municipales y las consejerías nacional, estatales y municipales, por lo que hay que esperar. Si el periodo estatutario de Candelario Pérez vence el próximo 27 de octubre, justamente se está a nueve días de que formalmente deje la dirigencia estatal, más el tiempo de gracia que se pudiera dar de acuerdo a la emisión de la convocatoria que lance la dirigencia nacional para la renovación de sus cuadros dirigentes, de allí que en estricto sentido legal, lo mejor que debieron hacer los integrantes de la corriente Nueva Izquierda es haber esperado el tiempo establecido en la convocatoria para la renovación total de la dirigencia estatal para entrarle con ganas con su propio aspirante a dirigir dicho partido, que podría ser Agustín Silva u otro integrante de la misma corriente, pero es de suponerse que internamente en este partido, algo se movió, algo no encajó, que ha llevado al secretario general, José Rueda, cuyo periodo estatutario también vence el próximo 27 de octubre a solicitar la remoción anticipada de Candelario Pérez, que no será tarea fácil, porque como advirtió el pasado lunes el Ojo Visor, que en todo está, Juan Manuel Fócil ya llamó a cohesionarse a todos los integrantes de su tribu para dar la pelea por la dirigencia estatal, que si bien semanas atrás se veía que la tribu ADN estaba puesta para que el cambio sería se diera de tersa, por aquello de que el pastel es grande, alcanza para todo, y la unidad interna era necesaria para ganar las elecciones constitucionales de 2018, algo se movió en manera intempestiva que ahora ya se ve claramente que ya está de nueva cuenta la confrontación interna con la emisión de esta cédula de notificación, que así se ve; una confrontación abierta entre la tribu Nueva Izquierda que encabeza Agustín Silva contra la tribu ADN que en el estado dirige el legislador local, Juan Manuel Fócil, quien oliendo lo que venía, se les adelantó, incluso, buscando establecer alianzas con otros grupos internos del PRD con la promesa de entregarles cargos de elección popular y cargos administrativos, dejando correr la versión de que él si cumple sus acuerdos. Desde luego que este “pleito interno”, que no es nuevo, que se vio desde el inicio de la administración del gobernador Arturo Núñez, pero estaba calmado, forma parte de los forcejeos políticos previos a la nominación del candidato al gobierno estatal que debe darse allá por el mes de diciembre y por la repartición de los otros cargos de elección popular, donde en su momento entrará el bombero emergente para apagar este fuego entre las corrientes perredistas. Ya verán. OJITOS Ahora si, enloqueció el alcalde de Macuspana, Cuco Rovirosa, que cree que puede pisotear la ley a su antojo sin sufrir las consecuencias de sus actos. Sus nefastos “asesores lo” siguen hundiendo en el estiércol de la inmundicia. Saben que pronto caerá, que sus funcionarios municipales lo abandonaron el pasado domingo en Cárdenas, donde parecía “perro sin dueño”, con perdón de los perros, pues se regresaron a Villahermosa a otro evento político en Los Candiles. Las fotos son elocuentes. Mañana jueves les cuento la película.