EL OCASO DE JOSERA DIAZ URIBE .- 26 Febrero 2013

 

Como verdaderas verduleras de mercado, tanto el director general del Colegio de Bachilleres de Tabasco, Jaime y Mier y Terán, como el dirigente del Sicobatab, José Ramón Díaz Uribe, se enfrascaron en un duelo de dimes y diretes, en el noticiero Telereportaje, acusándose de actos de corrupción y traiciones que debe ser tomado con mucha seriedad por las propias autoridades para iniciar las investigaciones de rigor y deslindar responsabilidades, ya que no es posible que la educación del nivel medio superior en el estado sigue secuestrado por un “líder” sindical que ha comprado propiedades a diestra y siniestra, sin conocer el origen del dinero, que se supone es de los propios docentes de ese sistema educativo.

En el noticiero Telereportaje conducido por Emmanuel Sibilla, el día de ayer se dio un hecho, bochornoso, deplorable, para la educación de Tabasco, ya que tanto el director general del Cobatab, Jaime Mier y Terán Suárez como el dirigente del Sicobatab, José Ramón Díaz Uribe, se enfrascaron en un duelo de descalificaciones que rayó en el cinismo y la desvergüenza, pues públicamente pretendieron dirimir con descalificaciones mutuas el conflicto de la paralización de ese sistema educativo, mañosamente secuestrado por Díaz Uribe, quien bajo una nueva modalidad está utilizando a los alumnos y padres de familias para que se enfrenten a la dirección general del Colegio de Bachilleres, solicitando la desaparición del examen departamental y que a los alumnos de 9 y 10 no se les aplique examen final. Para evitar ser sancionados instruyó a los maestros afiliados al Sicobatab para que induzcan a los estudiantes y a sus padres a entrar a este movimiento alevoso, que más allá de la simple preocupación educativa, el objetivo central es frenar a la propia dirección general que por instrucciones del Gobernador del Estado, Arturo Núñez ha decidido acabar de golpe y porrazo con las canonjías y privilegios de las que gozaba Josera Díaz, que todo indica tiene sus días contados en frente de ese sindicato.

En ese enfrentamiento verbal ante los micrófonos de Telereportaje, el director general del Cobatab, Jaime Mier se achicó, se acobardó ante la agresiva y soez actitud del dirigente sindical, quien sin mayor recato llamó mentiroso a su jefe jerárquico, se le olvidó a José Ramón, que independientemente de ser el líder sindical, no goza de Patente de Corzo para agredir verbalmente a quien le debe respeto, por ser su patrón; sí, Mier y Terán, es el patrón en este caso como director general del Cobatab, es el jefe jerárquico de José Ramón, por lo tanto éste, aun siendo representante sindical no tenía por qué llamar mentiroso de clase mundial a Mier, porque esta actitud grosera, violenta, arbitraria, era motivo suficiente para que el director general del Cobatab ahí en los micrófonos de Telereportaje hubiera anunciado el cese como trabajador del líder sindical porque precisamente en la Ley Federal del Trabajo claramente se especifica que la rescisión de contrato procede tajantemente cuando el trabajador agrede o le falta el respeto a su patrón, la verdad que le faltaron tamaños a Mier para acabar de tajo con éste cáncer sindical que se ha enriquecido a costillas de los propios trabajadores del Colegio de Bachilleres, a quienes ha sabido utilizar para amasar una fortuna que nunca en su vida, como simple trabajador, hubiera podido lograr.

Como decía el extinto Salvador José Neme Castillo en Tabasco todos nos conoces por nuestros nombres y nuestros apodos, nadie puede ocultar una gran riqueza o una enorme pobreza; José Ramón Díaz Uribe, es de esos que no podían ocultar su enorme pobreza pues trabajó como archivista en el diario Tabasco Hoy, donde después fue editor, mientras daba clases en escuelas particulares y se insertaba en el Colegio de Bachilleres de Tabasco, en el plantel número uno, donde gracias a la protección de Faudes Baños Baños, fundador del Sicobatab entró a las cuestiones sindicales, y posteriormente traicionó a su maestro y guía para secuestrar a la dirigencia sindical que ahora tiene en sus manos y que usa para su provecho personal.

Díaz Uribe vivía en una casita modesta en El Espejo con su esposa Verónica Hernández Medina a quien ahora sus malquerientes han bautizado como la Reina del Sur, pero no del pacífico, sino del Sur de Veracruz, de Las Choapas, y traían un vochito destartalado. De repente la abundancia llegó a la vida de José Ramón, que desconoció a sus verdaderos amigos, caminó de traición en traición, logrando tumbar a Faudes Baños de la dirigencia para quedarse él, reformando los estatutos sindicales para eternizarse y vaya que lo venía logrando hasta que llegó el cambio de gobierno, y como parte del saqueo y la corrupción del anterior gobierno granierista se ha puesto al descubierto que recibía 330 mil pesos mensuales para el dizque sostenimiento del sindicato, como si las cuotas sindicales no deberían utilizarse para esa finalidad.

Su enriquecimiento es inexplicable, porque ni juntando su salario con el de su esposa le hubiera alcanzado para comprar tantas propiedades, de ahí que en su insensatez de ocultar lo inocultable, o sea su riqueza, que de alguna parte debe haber salido, ha embarrado a parientes cercanos como al señor Roldán Hernández Flores, su suegro, a Ursula Medina Flores, su suegra, Adriana Hernández Medina, su cuñada, a su hermano, Oscar Antonio Díaz Uribe, y a sus hijas Karen Paola y Jessica Daniela Díaz Hernández, quienes aparecen con varias propiedades, cuando eran menores de edad, de allí que las autoridades competentes no les debe de temblar la mano para iniciar las investigaciones pertinentes para saber de donde obtuvo tanto dinero Josera Díaz para comprar bienes inmuebles como los que se detallan a continuación.

Propiedad en el lote 27, manzana 13, del fraccionamiento Heriberto KehoeVicent del municipio de Centro, con una superficie de 180 metros cuadrados, a nombre de su suegro Roldán Hernández Flores; en el fraccionamiento Real del Angel posee otra propiedad, en el lote 4, manzana 10, con una superficie de 160 metros cuadrados a nombre de su cuñada Adriana Hernández Medina.

Como los suegros de José Ramón Díaz Uribe son multimillonarios, ahora resulta que su suegra, la señora Ursula Medina Flores, adquirió una propiedad en el fraccionamiento Campestre 2000, en la manzana II, lote 32, inscrito el 26 de abril de 2007 ante el Notario Público número 27, con un valor de un millón de dólares, esta es la propiedad donde se reserva el usufructo y habitación vitalicia a favor de José Ramón.

En la ranchería Ixtacomitán, tercera sección, Centro, las hermanas Karen Paola y Jessica Daniela Díaz Hernández, por conducto de su abuelo, Roldán Hernández Flores, quien aparece como comprador de las propiedades para sus menores nietas, pero reservando el uso, usufructo y habitación vitalicia a favor de José Ramón Díaz Uribe y Verónica Hernández Medina, tienen dos predios rústicos, el primero, es polígono A, predio rústico, con una superficie de 58, 188.79 metros cuadrados, y el segundo, polígono B, predio rústico con una superficie 1, 870. 86 metros. Que abuelo tan benevolente para con sus nietas, que las hereda en vida.

En la misma ranchería Ixtacomitán, tercera sección aparece otra propiedad a nombre de Jessica Daniela y Karen Paola Díaz Hernández, adquirida por su mamá Verónica Hernández Medina, quien se reserva el uso, usufructo o habitación vitalicia. El predio es rústico con una medida de 3, 651. 57 metros cuadrados, con un valor de operación de 500 mil pesos. Ahí mismo aparece otro predio rústico con superficie de 04-00-00.00 hectáreas a favor de las hermanitas Jessica Daniela y Karen Paola.

En el fraccionamiento residencial Campestre Tabasco 2000 aparece otra propiedad a nombre de José Ramón Díaz Uribe, en el lote 5-A, manzana 10, con una superficie de 457. 334 metros cuadrados, inscrito en el Registro Público de la Propiedad el 27 deoctubre de 2011con un valor de operación de 1, 200, 000.00 pesos, y hay más propiedades otras en villa Playas del Rosario, en la ranchería Boqueron, y sin contar la propiedad de Curahueso en donde mañosamente se fue quedando con todos los predios que se habían comprado para viviendas de sus agremiados.

Ahí están los datos de todas las propiedades de José Ramón Díaz Uribe, ha llegado el momento en que las autoridades del cambio verdadero, realicen una investigación exhaustiva para determinar de donde obtuvo tanto dinero para comprar propiedades a nombre de sus hijas, sus suegros, sus cuñadas y sus hermanos, dejando la clara evidencia que el usufructo del uso, usufructo y habitación vitalicia, dejan en evidencia de quienes son las múltiples propiedades, el ocaso de José Ramón Díaz Uribe ha iniciado, esperando que a las autoridades competentes no les tiemble la mano para hacer sentir el peso de la ley, porque si perdonan, a pesar de las evidencias, las mismas autoridades estarán perdidas.

Ojitos
El gobernador del estado, Arturo Núñez Jiménez ha dicho con toda claridad que su gobierno está abierto al diálogo con la sección 29 del SNTE para resolver sus peticiones que las considera normales, pero también ha dejado en claro que la destitución del secretario de Educación, Rodolfo Lara Lagunas, no está sujeta a negociación, es decir, que no está dispuesto a ceder o sucumbir ante los chantajes de los sindicatos, cualquiera que así sea.

Visorcito
De igual manera a como ha salido a relucir las propiedades de Díaz Uribe, así deben salir las propiedades que adquirió el ex-dirigente de la sección 29 del SNTE, Pedro Estrada Almeida, la línea de transporte público que adquirió entre otras cosas, y no se queda atrás Guadalupe Arias Acopa, el actual secretario general, quien siendo el encargado de las finanzas, también se sirvió con la cuchara grande, hay que ver la casa que le construyó a sus padres en el llamado Arenal, que es parte de la disputa de La Ladrillera, más todas las residencias que construye en terrenos que no están a su nombre, pero que las pruebas palpables lo señalan que son de su propiedad. Es el momento de sacar las propiedades de estos líderes sindicales que solo utilizan como carne de cañón al magisterio.