Con el nombramiento de Daniel Ochoa Leyva como director general del Centro STIC-Tabasco de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, hay personas que han decidido advertirle que tiene que erradicar la pus y la corrupción que prevalece en esa institución, haciendo una limpia general de todos los cargos directivos, en donde durante muchos años han permanecido enquistados personas, que se han dedicado a saquear esa delegación, sin que sean sancionados.
Personas que laboran en esa dependencia y que prefieren el anonimato, hicieron llegar al Ojo Visor, que en todo está, documentación sobre la forma de cómo se estaban haciendo las cosas mal en el centro STIC-Tabasco que tiene en existencia 32 auditorías pendientes de solventar ante la Auditoría Superior de las Federación, de distintas obras que se vinieron realizando desde el 2017, donde el residente general de carreteras lo fue el ingeniero David Gastón Terrazas de la Vega, y en estos últimos años, para ser exacto el 16 de marzo de 2023 fue nombrado director general de la STIC-Tabasco, a quien precisamente acaba de relevar Daniel Ochoa Leyva.
Las observaciones de la Auditoria Superior de la Federación que están sin solventar sobre la mala construcción de obras carreteras que realizaron, debería ser motivo suficiente por el que deberían estar en la cárcel todos los ingenieros que han intervenido en estos graves señalamientos que significa el manejo de muchos miles de millones de pesos del presupuesto público que mal ejercieron, y no ha pasado nada.
Los deshonestos ex-funcionarios peñistas Gerardo Ruiz Esparza y Oscar Raúl Callejo fueron los que apadrinaron al ingeniero David Gastón Terrazas de la Vega, y lo enviaron a Tabasco como residente general de carreteras federales en 2012 de la delegación de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, y desde ahí dirigió las principales obras federales como fueron: el puente La Pigua, el libramiento de Villahermosa y la autopista Villahermosa-Puente Reforma (20 kilómetros) obra que ya lleva más de dos sexenios y no la han terminado, donde un grupo de ingenieros con el turbio manejo de los derechos de vía se volvieron millonarios en forma impune, sin que sean investigados y sancionados, de tal manera que todavía se debe el derecho de vía a diversas personas que fueron afectados con la construcción de estas carreteras.
El mal uso de los recursos públicos explica cuál es la causa de que al cruzar el puente La Pigua, los automovilistas tengan que disminuir la velocidad del vehículo para pasar a vuelta de rueda porque si no lo hacen así, revientan las llantas y le causan otros daños a la unidad motriz. También esa es la causa de que en el libramiento de la carretera Villahermosa-Aeropuerto, existen grandes hundimientos de la carpeta asfáltica que han impedido su correcto funcionamiento, por lo que tuvieron que seguirlo reparando y reparando, metiéndole muchos millones de pesos del presupuesto público en forma extraordinaria para que aguantara entrega, y en la actualidad se sigue con los mismos problemas de hundimientos, por la negligencia y corrupción de quienes tuvieron en sus manos la supervisión de la construcción.
Ahora se explica usted lector, porque los ocho carriles de la carretera Villahermosa-La Isla no la han construido bien y no tienen para cuando terminarla, a pesar de que lleva mas de dos sexenios su construcción.
En estas tres obras emblemáticas que debieron hacerse con todas las especificaciones requeridas y que están observadas por la Auditoría Superior de la Federación, ha tenido una participación importante el ingeniero David Gastón Terraza de la Vega, primero como residente general de carreteras federales, cargo al que llegó en 2012, y luego como director general del centro STIC-Tabasco, en donde hace poco de un mes fue relevado por Daniel Ochoa Leyva.
Es claro que el ingeniero David Terrazas originario del estado de Durango, se marchó de la entidad con las alforjas llenas de dinero mal habido, por las malas prácticas que empleó durante los últimos 13 años de su estancia en Tabasco, apoyado por sus padrinos políticos y en componenda con funcionarios federales como la coordinadora general de los 31 centros STIC en el país, como la tabasqueña Carlota Andrade, a quienes se les debería de investigar a fondo por su actuación en el sexenio anterior dentro de esa dependencia.
Y ahora se comenta, que este ingeniero, que dejo todas una estela de corrupción en Tabasco con las malas obras que dirigió, lo han contratado en las oficinas centrales de la STIC, con un nuevo cargo, lo que demuestra que la mafia peñista es pesada y poderosa, porque sin tomar en cuenta que dejó sin solventar observaciones de 32 auditorías que practicó la Auditoría Superior de la Federación, en vez de ser investigado para ser sancionado por no solventar las observaciones. junto con la mafia de ingenieros que dejó en el Centro STIC-Tabasco, es premiado con otro cargo.
Ojalá pronto, la presidente de la República, Claudia Sheinbaum se entere del pasado corrupto de este personaje y de quienes lo apadrinan con rasgos neoliberales, que siguen incrustado en esa dependencia a nivel federal como rémoras del pasado, para que sean investigados y castigados conforme a la ley y no manchen de corrupción la actual administración.
Ahora que en este sexenio se ha visto que cuando un funcionario público que comete tropelías o probables actos de corrupción es cesado e inhabilitado por varios años para no ocupar otro cargo, también se les debe obligar a devolver lo robado y pagar con cárcel su fechoría, es el momento de investigar a David Terrazas y a todos los ingenieros que dejó en el Centro STIC-Tabasco, porque ya es hora que nuestra entidad deje de ser saqueado por corruptos fuereños que se van tranquilamente con el producto sustraído del erario público y los ciudadanos tengan que pagar las consecuencias de las malas obras como el de La Pigua, que lo remiendan y remiendan para cubrir las hendiduras que existen por la mala obra realizada, y que se vuelve a deteriorar y los automovilistas están pagando las consecuencias de haberlo hecho mal porque tienen que pasar con sus vehículos a vuelta de rueda generando un horrible tráfico vehicular a las horas pico.
El Centro STIC-Tabasco esta integrado por la subdirección de Obras Públicas, la subdirección de Transporte, la subdirección Administrativa, y la subdirección de Comunicaciones, en todas estas áreas hay un nido de corrupción, no de ahora, si de hace muchos años que debe ser extirpado por el nuevo director general.
Para que usted lector tenga una idea, hasta el día que estuvo al frente de ese Centro, David Terrazas, como parte del contubernio, una sola familia manejaba o sigue manejando la administración, así tenemos que contador Raúl Avalos, es el jefe de Planeación, su esposa, Esther Rivera, es la jefa de Recursos Humanos, su cuñado Ulises Saavedra, maneja las compras y los servicios de ese Centro, mientras que su otra cuñada Maricela Rivera está enquistada siempre cerca de la subdirección Administrativa.
Es en la subdirección de Obras, donde hay un grupo de ingenieros que manejan la obra pública y que estaban al servicio del anterior director general, es donde se concentra la mayor corrupción, es el área donde se hizo negocios con el derecho de vía como parte de la construcción o remodelación de las carreteras, y donde el nuevo director Daniel Ochoa, debe centrar su atención, porque es ahí donde se hacen los grandes negocios ilegales, que les ha permitido a esos funcionarios públicos obtener buenos dividendos económicos, por lo que ya es tiempo que se acabe con la corrupción que ahí existe.
Daniel Ochoa debe hacer una limpia general, porque llegó a sentarse en un barril de pólvora, que le podría estallar con el tiempo en las manos, sino hace los cambios a fondo que se requieren en ese Centro, por cada una de las áreas que conforman esa institución tiene su mafia interna desde hace años, que se dedican a los actos de corrupción y ya es tiempo de que alguien llegue a acabar con esas malas prácticas.
La renovación del personal de confianza de las cuatro subdirecciones, pero más que nada en la de Obras Públicas, debe ser integral para que este Centro, estratégico para la obra pública de carreteras de Tabasco cumpla con su función fundamental que es brindar el mejor de los servicios federales a los tabasqueños.
En 2018 la Auditoría Superior de la Federación realizó varias auditorias al Centro STIC-Tabasco, específicamente a la Residencias General de Carreteras Federales, una de ellas con la clave de auditoria 326-DE, numero de observación 2017-0-09100-04-0326-15-002/EPRA/O114/202, misma que está en investigación en la Dirección General de Investigación de la Auditoría Superior de la Federación.
Así como esta, hay en total 32 auditorias realizadas al Centro STIC-Tabasco a diversas obras (carreteras), realizadas en 2017, 2018, 2021, sin que el director que le fue lo haya podido solventar y pese a las irregularidades cometidas, a nivel central han decidido premiarlo con otro cargo, cuando aquí dejó la pujs y la corrupción, que deberá ser extirpado por el nuevo director general.
OJITOS
Apenas el gobierno estatal anunció que se crearía el Museo Nacional Olmeca que será un gran proyecto para atraer al turismo, los detractores que nunca falta, saltaron a las redes sociales para intentar generar un falso debate, de que con este proyecto se dañara el medio ambiente y se acabará con el proyecto cultural del museo La Venta, obra creada por el poeta de América, Carlos Pellicer Cámara.
Hace poco los mismos detractores cuestionaban en las redes sociales que el gobierno que encabeza Javier May no se dedicaba a la promoción de la cultura, ni a crear más centros culturales que tanta falta hacen, cuando esta a la vista de todos que la Secretaría de Cultura a cargo de Aida Elba Castillo Santiago ha puesto todo su empeño no solamente en la promoción y difusión del patrimonio cultural que existe en Tabasco, sino que también trabaja en torno a su preservación.
Ahora que el gobierno estatal ha anunciado la creación del Museo Nacional Olmeca, cuyo proyecto está a cargo del Instituto Nacional de Antropología e Historia, estos mismos detractores han salido a decir que las autoridades estatales cometerán un ecocidio en el parque Tomás Garrido Canabal, con el derribamiento de árboles, así como se va a dañar el patrimonio cultural de Tabasco, como son las piezas Olmecas, que por muchos años se ha resguardado, nada más alejado de la realidad, es falso lo que pregonan los detractores, por el contrario, INAH será el encargado de cuidar y preservar el legado cultural de Tabasco.
Las cabezas Olmecas estarán mejor cuidadas, mejor preservadas, con los trabajos que se va a realizar con la creación de este nuevo Museo Nacional Olmeca, donde el INAH será la encargada de vigilar y cuidar el patrimonio cultural de Tabasco, como también se cuidará la cuestión ambiental para que no sufra daños, porque precisamente lo que este gobierno cuida, es la preservación del medio ambiente, ampliando las áreas protegidas, como las reservas ecológicas del Manatí en el municipio de Jonuta.
A los agoreros del desastre nada les embona, se parecen a la gata de angora, si no se hace nada, saltan gritan, comienzan a desacreditar que el gobierno no hace nada, pero si el gobierno anuncia un gran proyecto como este nuevo museo, hace todo lo contrario, salen a cuestionar porque se realizará esa obra y le buscan mil vueltas, porque el objetivo de ellos es desacreditar sin razón.
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