OJO VISOR
Jacinto López Cruz
Cuando en 1988,
meses después de haber renunciado a su militancia en el Partido Revolucionario
Institucional (PRI), del cual fue dirigente estatal, Andrés Manuel López
Obrador decidió abanderar a cuatro partidos de izquierda agrupados en el Frente
Democrático Nacional para ser candidato a la gubernatura de Tabasco, solo un
puñado de valientes tabasqueños decidieron acompañarlo en su aventura, bajo la
estigmatización del gobierno de que era un loco, un mesiánico o falso mesías,
entre otros epítetos.
Sostengo que ese
puñado de tabasqueños que abrazaron la lucha democrática al lado de Andrés
Manuel López Obrador, fueron valientes, porque a diferencia de la mayoría de
los integrantes de la clase política que se plegaron al gobierno, ellosdecidieron renunciar a las canonjías,
privilegios, jugosos sueldos y diferentes regalías que el gobierno de
extracción priista que encabezaba el gobernador sustituto, José María Peralta López les entregaba, a
cambio fueron objetos de hostilidades, persecución, desprecios, burlas, cárcel,
represión, pero convencidos de que esa lucha era por una causa justa para
desterrar la corrupción, la simulación, el enriquecimiento ilícito y para que
los pobres y los extremadamente pobres
recibieran mejores beneficios, no claudicaron en su lucha sino que por el
contrario cerraron filas en torno a Andrés Manuel López Obrador.
Como todo gobierno
que se sentía amenazados en sus intereses políticos y económicos, y ante el rápido crecimiento del candidato a
la gubernatura por el Frente Democrático Nacional (FDN) comenzaron a cerrar las
pinzas para estrangular toda posibilidad de triunfo electoral de Andrés Manuel
López Obrador, quien tenía como contrincante a Salvador José Neme Castillo,
abanderado del Partido Revolucionario Institucional, al que le tuvieron que
hacer cambios de última hora en la estructura partidista porque empezaba a
naufragar, trayendo de emergente a Roberto Madrazo, mientras que en el gobierno
estatal el entonces secretario de
Gobierno, Humberto Mayans Canabal le apretaba las tuercas al órgano electoral, que
dependía de su secretaria.
La lucha electoral
fue azarosa, desigual, desequilibrada, ya que por el lado oficial corrían los
millones de pesos por bajo el agua para apuntalar a Neme y por el otro lado, el
candidato de la izquierda, del FDN, recibía el apoyo de sus seguidores, que
ponían sus vehículos, su gasolina, que se cooperaban económicamente, que
evadían la vigilancia oficial y a pesar de la represión no dejaban solo a
Andrés Manuel López Obrador que diariamente y por diferentes medios de
comunicación del estado lo intentaban desacreditar
Puedo ir narrando
los sinsabores, desencantos, traiciones, las frustraciones que fue sufriendo
Andrés Manuel durante esta lucha que encabezaba y la siempre fiel Rocío
Beltrán se encargaba de levantarle los
ánimos, porque como reportero viví muy de cerca, cosas que otros no veían; renunciaron
candidatos a cargos de elección popular que estaban en la izquierda porque
fueron cooptados por el oficialismo, que también ejercía una férrea vigilancia hacia
el candidato izquierdista y toda su familia, sin embargo, los que estaban
convencidos que la lucha por democratizar las instituciones públicas tenía que
darse, se mantuvieron firmes, porque de acuerdo a la arenga de AMLO no se
luchaba por cargos públicos sino por convicción por lo que aportaban sus pocos recursos económicos y enfrentaban
con valentía al poder de Estado que les cerraba las puertas hasta sus propios
familiares para que no fueran contratados en el servicio público.
Durante esta lucha
democrática que emprendió AMLO la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco no fue la excepción, al
considerarse un brazo del oficialismo, las puertas fueron cerradas para el
candidato de izquierda, mientras que el candidato oficial era recibido con
bombo y platillo, y es ahí donde varias catedráticas de la antigua escuela de
derecho y de ciencias de la educación que creyeron firmemente en AMLO.
Dos de ellas, las
catedráticas Leticia del Carmen Romero Rodríguez, y María Trinidad Vera, no
midieron los riesgos que pudo haber llevado a que las corrieran de la
Universidad por “subversivas” y se convirtieron en promotoras incansables de
López Obrador entre sus alumnos y alumnas, porque creyeron firmemente en su
proyecto de transformar el estado y el país. Hoy la catedrática Romero con un
sentimiento de impotencia al ver que el proyecto por el que luchó, se desvió,
se sesgó, pues contra quienes se luchó en el pasado para desterrarlo de las
instituciones públicas porque son corresponsables de la brutal corrupción que
carcome las entrañas del país y el estado le escribió una carta al presidente
de México, la cual hizo pública en sus redes sociales.
Consciente de que
será atacada con vileza, de que los adversarios de ayer ahora incrustados en el
gobierno de la Cuarta Transformación se le irán a la yugular, Leticia Romero
decidió dejar constancia de cómo ve, de cómo siente lo que realmente está
pasando, sin lograr entender, por donde o en qué momento se perdió el proyecto
de López Obrador que hoy abiertamente gobierna con quienes en el pasado fueron
sus mal rancios y recalcitrantes enemigos políticos que lo acusaron de todo,
hasta de estar loco.
“querido Andrés
Manuel, solo hay hiel y no miel.
Mi vida entera la fui dejando en el proyecto de cambio
por el que luchamos juntos Andrés Manuel. Muchos me dijeron que había caminos
fáciles que llevaban al éxito, pero mi decisión de irme por el más tortuoso a
tu lado y con tu gran tesón ya estaba tomada.
Hoy segura estoy que ni siquiera recuerdas las veces que
Trini y yo te llevábamos clandestinamente a la División de Sociales de la
UJAT. Para que nuestros alumnos y alumnas te escucharán. Cada que ibas nos
costaba caro, se desquitaban con coartar nuestros derechos como trabajadoras
por considerarnos subversivas. Pero jamás nos dejamos!. No faltábamos a ninguno
de tus llamados, aunque a veces nos descontaban las faltas por revoltosas, nos
decían.
Hoy el dolor del fracaso, la amargura que me provoca ver en
qué se va convirtiendo poco a poco la alegría de ver tu triunfo, de ver por fin
la cinta de tres colores en tu pecho es a veces una dura carga. Escribo despacio porque las lágrimas no me
dejan hacerlo con la facilidad que a mí me salen las palabras.
Se me van terminando las justificaciones, las explicaciones,
los argumentos para refutar a los arrepentidos, a los desconfiados, a los
dolidos que dieron al igual que nosotras la vida entera por un ideal.
Entiendo tu apoyo incondicional a quien llamas
hermano, es tan claro que para sorpresa de muchos y muchas lo volviste
gobernador y hoy tú hombre de mayor confianza.
Incluso, todos estos años, me di a la tarea de explicar que lo apoyas, porque
necesitas gente leal, que seguro Adán se aplica contigo, aunque a nosotros nos
maltrate. Tal vez porque sabe que es mejor que no hayan testigos de su ausencia
durante los años de lucha. Pero debo decirte que cada vez me siento mas
agotada, porque pareciera que todo está al revés. Tal parece que así moriremos,
esperando el cambio prometido en nuestra tierra, donde gobiernan y pretenden
maltratarnos los mismos y las mismas.
Los tuyos, nos sentimos lastimados, burlados, agobiados,
insultados por la forma que los que más daño nos hicieron se apropian en
nuestra cara de un proyecto donde el esfuerzo y los muertos, los pusimos
nosotras y nosotros.
Vemos con sorpresa y rabia, que los que te despreciaban, a los que juntos a ti
combatimos, esos adversarios que tanto repudiamos a gritos en una sola voz
contigo, se apropian de nuestro rayito de esperanza.
Qué pasó Andrés Manuel?. En que te fallamos?, Que hicimos
mal?
Nos aplicamos para tener la honestidad valiente. Pero de
pronto fuimos burlados. Los canallas que no nos dejaron jamás crecer, ni en el
mundo cotidiano ni en la vida profesional, fueron escalando hasta quitarnos
todo, absolutamente todo. Se están
llevando la esperanza, los sueños, el amor hacia el proyecto. Y nos han dejado
un vacío muy fuerte.
No lo creímos Andrés Manuel, …de verdad es consejero de
Pemex Humberto Mayans? Aquel que en plaza de armas, en unos juegos mecánicos
para niños, nos reconoció como revoltosas y seguidoras del peje y desde su
poder gritó que los juegos mecánicos se apagaban para nosotros? Aquel que nos
mandaba decir con los propios estudiantes que tenía nuestros expedientes en
Gobernacion? Aquel que espiaba y que hasta los hermanos de la radio detestaban
por inmoral? Aquel con quien perdimos la compostura mentándonos la madre en tu
defensa y la de nuestro pueblo?
si Andrés Manuel, aún siendo profesoras nos poníamos al tú
por tú llenas de indignación, sin dejarnos humillar por sabernos tus seguidoras,
De verdad Andrés?, te parece Justo que nos dejan en Tabasco en calidad de
encargo? a manos del mismo gabinete de amigos y compadre de quienes nos hacían
la vida imposible?.
Hasta hace unos días, mi esperanza siempre fue, que no
supieras cómo nos ofenden en el proyecto que juntos construimos, en nuestro
tiempo, en nuestra casa pues… y que esas minucias no te debían distraer.
Tenía la esperanza que alguien te mentía. Intentaba convencerme y convencer y
repetía … el tiene que pelar cada día con víboras más grandes, acá nos
defendemos les decía, a los que aún con todo lo que nos despreció Adán Augusto
y sin saber porque, seguimos creyendo y animándonos unos a otros.
Pero en estos días, al conocer tu decisión de llevarte a
Adán y más aún permitirle jugar con las leyes, manipularlas al estilo de
cualquier dictador, entonces…entonces es cuando siento que ya no puedo más.
Al escuchar sus nombramientos, al leer los nombres de las
gentes que se lleva para estar cerca de ti, me pregunto, y no esos fueron y son
los fifis a que tanto combatimos? No merecían estar a tu lado los jóvenes que
jamás te fallaron?
Qué pasa Andres? La tristeza es tan Grande que puedo decirte que en mis casi 40
años de lucha, jamás había sentido tanto dolor en el pecho, el brazo me
hormiguea y las mandíbulas me duelen de mantenerlas apretadas, porque todo el
dolor se somatiza. No entiendo, pero además tampoco tiene lógica todo lo que
estamos viviendo y ojo, no somos tus adversarios, somos tu gente.
Todo comenzó con el llamado a la reconciliación, pero creo
que jamás calculamos que esa reconciliación equivalía, a ceder nuestra voluntad
de lucha y a vivir de nuevo los momentos más amargos. Quienes no saben que nos
formamos a tu lado, creen que peleamos por un cargo y nos hacen burlas de
nuevo, nos llaman perdedoras, jodidas y nos insultan como antes.
Creo que no entienden, porque jamás caminaron contigo, jamás
les brillaron los ojos de esperanza, escuchándote en el parque o la deportiva,
espacios atiborrados de nosotras! de nuestra alegría de nuestra energía;
gritando, bailando brincado con los niños y niñas en los hombros o en la
espalda.
No, Andrés jamás nos esperemos esto, algunas tenemos como
tú, más de 60 años. Y tienen razón los que se mofan, seguimos igual,
peleando por los que menos tienen, levantando la voz por el jodido.
Qué puesto podemos ambicionar, si por lo que luchamos es por
una mejor vida, qué cargo podemos desear cuando el cansancio se refleja ya en
nuestros rostros, qué ambición de dinero, cuando nuestra vida se basó en el
estudio o el trabajo sin descanso, para convertir el esfuerzo en nuestra carta
de presentación para poder sentirnos a salvo.En lo personal Andrés mi querido
Andrés (que así se llama mi primogénito) que puedo ambicionar o envidiar, si siempre
he tenido mi quehacer académico, que amo y me encanta. Si gracias a lo
aprendido a tu lado mis hijos son hombres de bien que ya volaron lejos.
No Andrés Manuel, a mi me duelen los otros, a mi me duele
ver como en Tabasco para los hijos y nietos de quienes también empujaron, en
los momentos más duros, solo hay hiel y no miel; son hoy como ayer objeto de
burla, por parte de los hijos de quienes nos humillaron y nos golpearon
físicamente a quienes les reparten cargos y oportunidades. Hoy portan la playera
y debo confesarte, me causa indignación ver sus rostros de mofa para con los
nuestros…..”.
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