miércoles, 6 de diciembre de 2017

EL CONCLAVE DE LA QUINTA

El conclave realizado el pasado lunes por la tarde en la Quinta Grijalva, en la que estuvieron los seis aspirantes que buscan la candidatura a la gubernatura, el dirigente estatal del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Darvin González Ballina, con el Gobernador del Estado, sirvió para calmar los ánimos y para confirmar que Arturo Núñez Jiménez si cumple su palabra, pues no será el gran elector del candidato al gobierno, sino que por medio de una encuesta se nominará al mejor posicionado. Desde hace varios meses, en diferentes discursos que pronunció, así como en entrevistas que concedió, en la medida que se acercaba el proceso electoral, el gobernador Arturo Núñez venía insistiendo en que no se entrometería en la nominación del candidato a la gubernatura de su partido (el PRD), quee no aplicaría el clásico dedazo, porque le quedaba claro que una imposición, a como había sucedido en otros estados del país donde hubo recientes elecciones y quienes fueron gobernadores metieron la mano para designar a su sucesor, les resultó contraproducente porque ahí perdieron, por lo que él se había pronunciado por un método más eficaz para esa designación, que dejará satisfecho a todos los aspirantes como a los grupos o tribus que existen dentro del Sol Azteca y ese método es precisamente la encuesta, pero pocos creyeron que cumpliría su palabra. De la misma manera el gobernador Arturo Núñez, quien se había descartado como el gran elector de la sucesión gubernamental en su partido, se pronunció abiertamente, eso sí, de intervenir y de reunirse con los actores políticos del PRD con el objetivo de conciliar y de llegar a un buen acuerdo, dando garantías de que habría piso parejo para todos los aspirantes y de que se les mediría a todos para determinar en base a las encuestas, quien estaba mejor posicionado y se comprometió a respetar el resultado de dichas encuestas, porque obviamente eso fortalecería al Partido de la Revolución Democrática y ayudaría a ganar de nueva cuenta la elección constitucional de 2018. Cuando se generó el conflicto entre el grupo Nueva Izquierda con el grupo focilista representante en el estado de la tribu ADN, por la destitución de Candelario Pérez Alvarado como dirigente estatal del PRD y se nominó como dirigente sustituto a Darvin González Ballina, el legislador local Juan Manuel Fócil en una actitud completamente radical, acusó al gobernador Núñez de estar detrás del conflicto que se había suscitado y que no reconocía a la nueva dirigencia, llegando al extremo de pretender boicotear en el Congreso con su grupo de legisladores una iniciativa propuesto por el Ejecutivo y que sería aprobado en el pleno, pero su estrategia le falló, porque otros legisladores (priistas) dieron su aprobación al dictamen. Mientras Fócil mantenía su radicalismo que llevó a interpretar a los actos políticos de oposición de que al interior del PRD vendría una gran fractura que podría beneficiar a Morena en la elección constitucional del 2018, el gobernador en forma prudente, sin caer en la provocación de Fócil, lo llamó a serenarse, de que se sentarían a dialogar para dejar en claro que como primera autoridad del estado que no había metido la mano en el relevo en la dirigencia y que así seguiría de respetuoso, dejando que el partido hiciera el trabajo que le corresponde para nominar al candidato a la gubernatura y a los otros cargos de elección popular, y cumplió su palabra se sentó con Fócil a dialogar. Juan Manuel Fócil aceptó el diálogo ofrecido por el gobernador y salió convencido de ese encuentro, de que por medio de encuestas se decidiría la candidatura gubernamental que sueña con alcanzar, y que de la misma forma se irían dando los mecanismos para las nominaciones de presidentes municipales, regidores y diputados locales, porque había plena garantía de que el jefe del Ejecutivo sería respetuoso en las designaciones de las candidaturas, sobre todo, al gobierno estatal. Mientras afuera, en la calle, era un mar de conjeturas y de suposiciones que ya daban por bueno a este, o al otro aspirante como el nominado a la candidatura gubernamental, que incluso, llevó a avezados comunicadores a difundir falsamente en redes sociales, de que ya había un acuerdo, de que Pepe Toño fuera el candidato, en el conclave del pasado lunes en la Quinta Grijalva, el gobernador se encargó de calmar el ánimo de los aspirantes al decirles que de su parte había plena garantía de respetar el resultado de las encuestas que se realizarán la próxima semana, de que el candidato al Gobierno del Estado por el PRD y seguramente por el Frente Ciudadano que se constituirá, será el que esté mejor posicionado en dichas encuestas. El gobernador volvió a respetar su palabra. Bajo acuerdos claros, que devolvieron la tranquilidad a los aspirantes, una vez más, se comprueba que el gobernador Núñez es un hombre de palabra, que no será el gran elector, sino que dejará que las encuestas indiquen quien es el mejor posicionado que le permitirá al PRD tener la certeza de que volverá a ganar las elecciones, porque los seis aspirantes se comprometieron a respetar los resultados y una vez que se conozca sumarse al ganador para trabajar en unidad para sacar adelante las elecciones constitucionales de 2018 y así retener la gubernatura. Una vez controlado lo que parecía una inminente ruptura al interior del PRD, por las fricciones entre la corriente Nueva Izquierda y ADN, según la apreciación de los grupos opositores, gracias a la habilidad política del gobernador Núñez que calmó las aguas, el siguiente paso, fue el cónclave del pasado lunes en la Quinta Grijalva, en donde todos los aspirantes a la candidatura a la gubernatura, Gerardo Gaudiano Rovirosa; al presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso local, José Antonio de la Vega; al Senador de la República, Fernando Enrique Mayans Canabal; al director del Colegio de Bachilleres de Tabasco, Jaime Mier y Terán; al ex-titular de la SDET, David Gustavo Rodríguez Rosario, y el diputado local, Juan Manuel Fócil Pérez, salieron convencidos de que las encuestas que se aplicarán mostrará al mejor posicionado de los seis, que sin duda, se convertirá en candidato a la gubernatura. El legislador local, Juan Manuel Fócil que no creía en las palabras del gobernador, ahora si está convencido de que habrá transparencia en esta decisión, declarando ayer que: “la idea es sacar un candidato de unidad, vía la encuesta, que ese candidato de unidad ayude al PRD a dar la cara para que se logre el triunfo. El gobernador (Núñez) está dando su palabra que en el proceso interno exista rectitud y honestidad en la encuesta y que salga el mejor", dando a conocer que será la empresa Dinamia la que realice las encuestas con las siguientes preguntas: ¿qué gente te conoce?; ¿qué opinión tienen de ti?; ¿a quién prefieres de candidato?; ¿dentro del PRD a quien prefieres como candidato? Y la quinta, se hará un cruzamiento con candidatos de otros partidos políticos, para conocer cómo están posicionados. OJITOS A 40 años de la Reforma Política de 1977, “debemos trabajar por tener una mejor representación proporcional, porque no podemos suponer que eliminándola nuestro país avanzará, sino por el contrario, implicaría un retroceso”, aseguró el Gobernador Arturo Núñez Jiménez. Al participar en el seminario “A cuatro décadas de la Reforma Político-Electoral de 1977. Balance y perspectivas” que se realizó en la Ciudad de México, el gobernador explicó que la mayor aportación de esa reforma fue introducir la representación proporcional para que nadie se quedara sin representación dentro de la democracia en México, resaltando que la representación proporcional es un principio tan legítimo y tan válido como lo es el de mayoría, porque fue dirigido a favorecer la entrada de las minorías de manera segmentada. En el marco del evento organizado por el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, coordinado por Diego Valadés y César Astudillo, reflexionó también sobre la defensa de los partidos, obligándolos a que mejoren su democracia, ya que deben corregir muchas cosas, pero no deben desaparecer. “La democracia moderna es democracia de partidos, aún con lo desprestigiado y con la autocrítica que tenemos la obligación de hacer quienes militamos en ellos, porque creo que no hay nada mejor todavía que haya inventado el hombre que los partidos políticos”, aseveró, pronunciándose a favor de los gobiernos de coalición, que permitan trabajar para la construcción real de una opción de gobierno plural y, con ello, se pueda acabar con el presidencialismo hegemónico que sigue vigente. “Un gobierno de coalición debería cambiar eso, con un gobierno colegiado, con un gabinete que tome decisiones colegiadas. México ya no está para ser país de un solo hombre, como dice Enrique González Pedrero, en su biografía de Antonio López de Santa Anna”, explicó. Asimismo, argumentó que en el caso de los políticos con inclinaciones independentistas, éstos no generarán un gobierno que permita la democracia por la que se ha trabajado en los últimos años. “Es claro que los candidatos independientes eran para otro momento. Efectivamente, son un buen ingrediente democrático, son un acicate para que los partidos se reformen y pongan “sus barbas a remojar”, pero no son la solución de fondo, porque, una serie de candidatos independientes buenos, no es mejor que un sistema de partidos bueno”. “Están bien los independientes, pero no nos van a dar gobernabilidad”, sentenció el jefe del Ejecutivo estatal. Consideró que en lugar de buscar la democracia por la vía independiente, el reto a lograr es que en el país exista un sistema de partidos efectivo y que sea funcional, ya que el desprestigio de los partidos se ha vuelto hoy algo real. En dicha mesa, también participaron Amalia García Medina, ex-gobernadora de Zacatecas por el PRD; Manlio Fabio Beltrones, ex-dirigente nacional del PRI; y Diego Fernández de Cevallos, ex-candidato presidencial por el PAN. VISORCITO Renegando de lo que ayer fue, de haber construido toda su carrera política en el PRI, donde fue diputado federal, diputado local, presidente municipal de Centro, y candidato al gobierno estatal en 2012, y de haber abrevado de la mano, de quien lo ayudó a formarse políticamente, como es el gobernador Arturo Núñez, ayer se presentó en el Instituto Electoral, Jesús Alí de la Torre, para presentar su carta de intención para ser candidato independiente al gobierno de Tabasco. Chucho Alí perdió la mejor oportunidad de su vida en el 2012, cuando en un acuerdo cupular en el PRI nacional, de ese acuerdo que ahora cuestiona y denuncia que es una farsa en la que incurren los partidos políticos para imponer a sus candidatos, él fue ungido como candidato al gobierno estatal. Completamente envenenado, como si ser detractor le fuera a dar mayor plusvalía política, Chucho Alí se lanzó en contra de los partidos políticos, “todos los partidos políticos están cortados con la misma tijera, todos los partidos políticos nos han traicionado”, y como si no toda su carrera política lo hubiera hecho en el PRI, y como si no le debiera su formación política a quien fuera su maestro y guía, Arturo Núñez, de quien fue secretario auxiliar y particular en los cargos federales que tuvo el gobernador, ahora despotrica en su contra, acusa que hay actos de corrupción, cuando a su paso por el ayuntamiento dejó una estela de corrupción al grado que varios de sus ex-funcionarios fueron inhabilitados. Si ha traicionado y habla pestes de quien lo formó políticamente, ¿qué puede esperar el pueblo de un político de su naturaleza?, solo traición y más traición.

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