PRIISTAS EXIGEN CONSULTA

En los últimos meses, en la medida que se acerca la XXII Asamblea Nacional Ordinaria del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en diversos cuadros va tomando fuerza la exigencia, de que para la elección del candidato a la presidencia de la República, en los momentos cruciales que están viviendo como instituto político, se realice una consulta a las bases en todo el país para esa selección, en vez de la decisión vertical del dedazo presidencial que puede terminarlos de hundir en las elecciones constitucionales de 2018.

La mayoría de los integrantes de la clase priista del país, están consciente que el sumo desaseo político de su presidente de la República, Enrique Peña Nieto, aunado a los actos de corrupción de los secretarios de su gabinete, como de ex-gobernadores, algunos que están presos y otros que andan huyendo, ha servido para generar un clima de incertidumbre entre la población del país y que esto, sea una de las principales razones que las clases sociales más desprotegidas hayan puesto sus ojos en el dirigente nacional de Morena, Andrés Manuel López Obrador y lo vean como el salvador de nuestro nación y el que puede resolver todos los males, aunque esto sea solo una falacia, pues la ciudadanía busca fincar sus esperanzas en alguien que les de aliento que la situación económica, social y de seguridad, puede cambiar.

En lo que va del sexenio de Enrique Peña Nieto, el Partido Revolucionario Institucional ha perdido cerca de cinco millones de votos en todo el país, lo que ha originado que haya perdido la mayoría de los gobiernos estatales que están en manos de los partidos opositores, siete de los cuales, lo perdió el PRI durante las elecciones pasadas, de allí, que diferentes cuadros políticos se estén pronunciando, ante el grave riesgo de que pierdan la elección presidencial, porque en esta asamblea se apruebe la selección del candidato presidencial no sea por dedazo o por imposición, sino que sea por medio de una consulta interna sus bases en todo el país, que los vuelva más competitivos frente a Morena y al Frente Amplio Democrático que conformará el PRD, el PAN y Movimiento Ciudadano, que darán la pelea electoral por ganar la presidencia de la República en 2018.

Ante la crisis política que vive el PRI, el grupo Democracia Interna fijó un posicionamiento: “Hace ya poco más de un año, ante la decisión de designar a Enrique Ochoa Reza como Presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Revolucionario Institucional, un grupo de compañeras y compañeros priistas, preocupados por el mensaje que esa imposición daba a la militancia, expusimos a Ochoa Reza nuestros puntos de vista sobre el momento que pasa nuestro Partido y la necesidad urgente de realizar la XXII Asamblea Nacional Ordinaria, pospuesta ya hacía algunos meses y aprovechar la oportunidad que debería ofrecer la asamblea para definir un proyecto de nación acorde a las necesidades de la población y para revisar el andamiaje estatutario que nos rige como instituto político.

A partir de entonces miles de priistas se han unido para construir lo que hoy es ya una expresión nacional dentro del PRI, Democracia Interna, conformada por quienes estamos convencidos de que un país que quiere perfeccionar su democracia, merece un PRI democrático, sin decisiones cupulares y sin sumisión a sus dirigencias. Solamente en los regímenes autoritarios los partidos políticos son apéndices del gobierno y sus integrantes eternos obedientes de los designios del dictador.

México no sólo dejo de crecer económicamente en las pasadas tres décadas, a partir de la llegada de la tecnocracia neoliberal al gobierno. La pobreza llega ya a 60 millones de mexicanos y la delincuencia, nutrida en gran medida por esa pobreza, ha crecido exponencialmente generando el clima de inseguridad en el que vivimos. En contraste la población sumida en la pobreza ve con profundo enojo a una clase política tristemente representada por una parte por los jóvenes ex gobernadores de todos los partidos que hoy enfrentan a la justicia por sus excesos pero también por diputados y senadores cuyo costo se percibe exorbitado cuando se compara con los resultados que ofrecen al país.

En poco más de un año hemos podido constatar que en los hechos, la dirigencia del PRI, contra su propio discurso, ha hecho oídos sordos no sólo a los pronunciamientos de Democracia Interna y de muchas otras voces, sino que no ha querido ayudar al Presidente Peña Nieto a trascender en la historia del Partido tomándole la palabra y dándole independencia a nuestro Partido del Presidente de la República. En todos estos meses no hemos escuchado ni del licenciado Ocho Reza ni de la licenciada Ruiz Massieu Salinas hacerse eco del enojo ciudadano en torno a algunas decisiones del Gobierno de la República, ni por el gasolinazo, ni siquiera por el socavón de Cuernavaca, por citar sólo dos ejemplos que tanto le han costado a la imagen del Presidente y por ende al Partido que no ha marcado la distancia ofrecida por él. El reclamo por la renuncia del Secretario de Comunicaciones y Transportes ante diversos señalamientos que culminan con la tragedia del paso exprés de Cuernavaca, es prácticamente unánime, pero la dirigencia del PRI no ha dicho nada.

Ni Enrique Ochoa Reza, ni Claudia Ruiz Massieu Salinas parecen darse cuenta que con la sumisión, la ceguera y la sordera que han mostrado, serán responsables de nuevas fracturas y rompimientos, más profundos que los de 1988. A partir de 2012 hemos perdido cinco millones de votos, la aceptación del PRI ha caído por debajo del 20 por ciento y enfrentamos en cada proceso a partidos competitivos en los que con frecuencia salimos derrotados o ganamos sólo por la contribución de los militantes de otras fuerzas con las que participamos coaligados. Los rompimientos en estos años son de sobra conocidos y, todos, han sido consecuencia de la falta de sensibilidad de las dirigencias que no han sabido o no han querido abrirles la posibilidad de competir por candidaturas en procesos democráticos.

Y, ¿qué decir de los trabajos rumbo a la Asamblea Nacional? En varias asambleas estatales se ha documentado la descarada designación antidemocrática de los delegados omitiendo la lectura de las propuestas, indispensable para que la militancia pudiera saber a quienes elegía o, peor aún, impidiendo a líderes y grupos no alineados con las dirigencias estatales el acceso a las asambleas. En otros casos, las asambleas han sido convocadas por comités directivos estatales caducos y, por lo tanto, sin facultades legales para convocar a asamblea.

Ha quedado claro que la dirigencia pretende tener una Asamblea “light” en la que sólo se modifiquen los estatutos para dar lugar a una candidatura externa y se apruebe como proyecto de nación la continuidad del modelo neoliberal reprobado por sesenta millones de pobres.

Por todo ello, compañeras y compañeros priistas, Democracia Interna los invita a reflexionar sobre las propuestas que reiteradamente hemos presentado ante la dirigencia con miras a su discusión en la próxima Asamblea:

1. Reiteramos enfáticamente que es necesario modificar los estatutos para establecer la consulta a militantes y simpatizantes como el único método para elegir a los candidatos del PRI a todos los cargos de representación popular tanto de mayoría como de representación proporcional y a las dirigencias municipales, estatales y nacional. Desde luego y, en primerísimo lugar, consulta a la base para elegir al candidato a la presidencia de la república.

2. Es un reclamo de la militancia que se establezca con toda claridad en nuestros estatutos que no se permitirá nunca más que un legislador plurinominal sea postulado a otro cargo plurinominal. Si pretende continuar en el legislativo, deberá someterse al escrutinio de las urnas.

3. Coincidimos con otras corrientes de opinión en la necesidad de modificar los estatutos para eliminar cualquier requisito adicional al que se le pide a los candidatos ciudadanos dejando como únicos requisitos que sus precandidaturas sea respaldadas cuando menos por el uno por ciento del padrón correspondiente y que en cualquier caso, aun siendo precandidatos únicos, se someta a consulta a militantes y simpatizantes su aprobación.

4. Reafirmamos nuestra convicción en la necesidad de discutir en la Asamblea un proyecto de nación con nuevos paradigmas en desarrollo económico; en desarrollo social; en el combate a la corrupción; en el combate a la delincuencia organizada. Dejemos atrás los postulados neoliberales, cambiemos la política de desarrollo social para dejar el asistencialismo y promover la producción, promovamos el endurecimiento de las penas en casos de corrupción en el Gobierno y propongamos la creación de una instancia fuera de la SEGOB para el combate a la delincuencia.

Ante la actitud altanera de Ochoa Reza y de Ruiz Massieu Salinas, ante la falta de interés en construir un Partido sólido a partir de una propuesta fresca, posible y con un alto contenido social y de desarrollo económico sustentado en un modelo apartado del neoliberalismo, ante la negativa de incluir a todas las voces, pero sobre todo a las que discrepan del modelo de país que ya demostró su incapacidad para abatir la pobreza y así construir una sociedad más justa, vamos a participar con decisión en la Asamblea Nacional.

Vamos por un candidato a la Presidencia de México surgido, formado y comprometido con los ideales del Partido de democracia y justicia social.

Vamos por la consulta a la militancia y los simpatizantes con nuestros ideales para seleccionar a candidatos y dirigentes del PRI.

Vamos por la construcción de un proyecto de país que responda a las demandas de la sociedad que exige terminar con la pobreza; con la inseguridad; con la corrupción, con la inequidad en la distribución de la riqueza; que ofrezca alternativas una sociedad que quiere fuentes de empleo dignas en lugar de dádivas de su gobierno, que quiere instituciones democráticas sólidas y transparentes; una sociedad que quiere, en síntesis, un gobierno que se gane el respeto de la sociedad por su compromiso, por su capacidad y por sus resultados.

Los priistas dignos haremos que nuestras ideas se escuchen y se discutan en la Asamblea Nacional lo quiera o no la dirigencia. No queremos imponer nuestros argumentos, pero tampoco vamos solamente a validar los que se nos presenten. Vamos a construir juntos el PRI del siglo XXI. Eso es lo que no quieren entender ni Ochoa Reza ni Ruiz Massieu Salinas. No se equivoquen. Si no cambiamos, nos va a cambiar la sociedad”. Hasta ahí el posicionamiento.

Ojitos 

El Secretario de Seguridad Pública del estado, Jorge Alberto Aguirre Carbajal, acudió al poblado C-27 del municipio de Cárdenas, donde acordó con la comunidad trabajar unidos para garantizar la tranquilidad en la zona, precisando que la división entre autoridades y ciudadanos sólo beneficia a la delincuencia, “por eso, lo que tenemos que hacer es unirnos y por eso estoy aquí, para trabajar con ustedes y poder brindar la seguridad que se requiere”.

Pedro Oliva, habitante del lugar, agradeció al Secretario la atención que brinda a esa comunidad al manifestar que “está muy dolida nuestra gente” y aprovechó la ocasión para descartar que en el C-27 haya autodefensas. “Sobre la discusión que se dio de que teníamos autodefensas, nos hacen un montaje con gente armada hasta los dientes, ¿de dónde vamos a agarrar armas nosotros bastante fuertes?”, expresó. “Ya dialogamos, vamos a trabajar, estoy aquí para eso y todo lo demás que se diga es mentira, esa es la línea de la Secretaría de Seguridad Pública, trabajar para el ciudadano, trabajar para el pueblo, eso es lo que nos ha instruido el Gobernador Arturo Núñez”, remarcó el secretario.