CAIN, TIRANO

La semana pasada sorprendió a propios y extraños la actitud violenta del dirigente nacional del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, quien tachó de traidor a su hermano Arturo López Obrador Obrador porque éste se pronunció a favor del priista  Héctor Yunez como candidato al gobierno de Veracruz, por lo que también le reviró que deje de comportarse como tirano.

Arturo López Obrador puso al descubierto el verdadero rostro de su hermano AMLO de quien no solamente sostuvo que se comporta como un tirano porque quiere que todos piensen igual que él , sino que es un malagradecido que “patea a su familia” luego de que estos abrazaron su lucha política en 1988 aun a costa de sufrir represalias, cuando no había ni para la gasolina y ahí estuvieron pese a que ha sido un ingrato.

El affaire entre los hermanos López Obrador inició la semana pasada cuando Arturo López Obrador que radica en Veracruz de pronunció a favor del priista Héctor Yuñez como el mejor candidato al gobierno de Veracruz, por encima del candidato de Morena, Cuitláhuac García, que lleva diez puntos de preferencia electoral cuando para ganar se requiere entre  45 o 50 puntos de ventaja, ante lo cual Andrés Manuel reviró que hasta en la familia hay traidores y de estar por conveniencia del lado de los traidores.

Arturo López sostuvo que su hermano Andrés es un ingrato que cree que todos son corruptos y que solamente él es honesto junto con los que están en Morena, por lo que se parece al precandidato a la presidencia de Estados Unidos Donald Trump, que es un tirano, un radical;  si se piensa contrario a él (Andrés)  inmediatamente son tachados de corruptos y cree que solamente  si están en Morena son honestos, cuando en todos los partidos hay gente honesta.

Dejo en claro que Andrés Manuel López Obrador no es a como se pinta o a como lo pintan, porque tiene actitudes despóticas y tiranas, porque no acepta cuestionamientos, no acepta que le digan sus verdades, es “candil de la calle y oscuridad de su casa” porque se ha dedicado a patear a su familia y quienes lo han ayudado, por lo que es un malagradecido, después que desde 1988 cuando inició su lucha en el Frente Democrático Nacional sus cinco hermanos lo apoyaron aun a costa de sufrir represalias, cuando no había dinero, cuando no había para gasolina, ni medios de transporte para movilizarse, y hasta se arriesgaba la vida, y por eso, porque Andrés es malagradecido y porque no pueden vivir a la sombra del “caudillo” con actitud tiránica, como personas adultas han decidido seguir su propio camino.

Arturo acusó que ahora que hay elecciones extraordinarias en el municipio de Centro, Tabasco, y cuando su ahora candidato Octavio Romero Oropeza, quedó la vez pasada en cuarto lugar, su hermano Andrés Manuel anda manejando que las encuestas están cuchareadas, y cuando se le dice que no es competitivo estalla en furia y acusa que quien se lo dice es intolerante o forma parte de la mafia en el poder, por lo que esa actitud tiránica es comparada con la de Donald Trump que odia a los mexicanos, es decir, Andrés Manuel odia a todo aquel que esté en su contra y los acusa de corruptos, mientras que los que se pasan a su partido, Morena, inmediatamente los exonera y se convierten en honestos, castos y puros, como sucedió con Evaristo Hernández Cruz, que en un acto de cinismo se atrevió a decir que todos los priistas que se fueran a su partido se les limpiaba sus actos de corrupción.

Efectivamente, a lo largo de sus años de lucha política, una de las mayores características de Andrés Manuel López Obrador es que solo acepta sumisión, que le rehúye a los cuestionamientos porque el único que debe pensar es él, su ingratitud es su mayor norma de conducta, por eso a su lado se han quedado los serviles los que dicen: “si señor” a todo lo que él piensa y ordena, mientras que aquellas que tuvieron la osadía de cuestionarlo o de discrepar de lo que él decía, se deshizo de todos, los corrió.

Pero esa enfermedad de esquizofrenia que se traduce en radicalismo tropical lo trae en la sangre Andrés Manuel López Obrador desde que fuera adolescente, desde que accidental, imprudencial o intencionalmente privara de un certero balazo en la cabeza a su hermano de 15 años José Ramón López Obrador, en el negocio de telas de su padre llamado “Novedades Andrés”.

Para que los jóvenes y para las personas que no cumplen los 40 años bien vale la pena, revivir este pasaje triste, grotesco, para que entiendan el por qué Andrés Manuel López Obrador a como lo dicen su hermano Arturo siempre ha pateado a su familia, y si eso ha hecho con su sangre, la misma suerte corrieron muchos de los que iniciaron la lucha en el Frente Democrático Nacional que más tarde se transformó en Partido de la Revolución Democrática que fueron corridos o expulsados acusados de prácticas corruptas, solo porque pensaban diferente al Pejemán.

Cuentan las crónicas de las páginas rojas de los periódicos Presente, Rumbo Nuevo y Diario de Tabasco del miércoles nueve de julio de 1969, que un día anterior, o sea el martes 0cho de julio de 1969 entre la una y media y cuatro de la tarde, en el negocio de telas llamado “Novedades Andrés” que se localizaba entre las calles Progreso y Primavera enfrente del mercado “Pino Suárez” se suscitó un hecho de sangre que marcaría para siempre a la familia López Obrador, que al paso de los años se marcharon de Villahermosa.

Ante el agente del Ministerio Publico que se constituyó en el lugar de los hechos, Arnulfo Sánchez Méndez y su secretario Miguel Angel Peña Martínez (hermano de Vicente Peña) Andrés Manuel relató que su hermano menor José Ramón llegó al negocio de su padre donde él se encontraba y tomo de un casillero una escuadra 38 con la que le dijo que iba a espantar a otro compañero de un negocio de zapatería que estaba cerca, por lo que le dijo que lo dejara en su lugar, por lo que no sabe en qué momento el arma se disparó y un balazo impactó en la cabeza de su hermano, quien cayó en la puerta del negocio, donde quedó bañado en sangre.

El homicidio accidental, imprudencial o intencional cometido por Andrés Manuel Lopez Obrador no tuvo castigo,  porque su padre don Andrés López Ramón, ampliamente conocido como comerciante en Villahermosa, obtuvo el apoyo del licenciado Payambé López Falconi funcionario del gobierno estatal para que la Procuraduría General de Justicia del Estado por conducto del entonces director de Averiguaciones Previas el famoso Chelo Lomasto -padre de un subsecretario de la SETAB- le diera carpetazo al asunto como un homicidio imprudencial, pese a que las evidencias, la pistola y el casquillo de la bala fueron encontrados, escondido por el mismo AMLO que intentó limpiar la escena del crimen.

Pero este hecho que dejó ensangrentadas las manos de Andrés Manuel al sacrificar a su propio hermano marcó para siempre la relación familiar entre él y su padre,  que poco después cerraría el negocio de Telas “Novedades Andrés” para marcharse de Villahermosa. El extinto José Ramón de escasos quince años fue velado por sus padres, Andrés López Ramón y Manuelita Obrador en su domicilio de la primera cerrada de Pedro Fuentes en esta ciudad de Villahermosa.

Esta historia de sangre entre AMLO y su extinto hermano José Ramón es equiparable a la cita bíblica del Génesis donde el hermano mayor Caín asesinó con una quijada de burro a su hermano menor Abel y fue recriminado por el Señor de los Cielos quien le preguntó:¿Dónde está tu hermano Abel? Y él respondió: No sé. ¿Soy yo acaso guardián de mi hermano?, entonces el señor le dijo: ¿Qué has hecho? La voz de la sangre de tu hermano clama a mí desde la tierra. Ahora pues, maldito eres de la tierra, que ha abierto su boca para recibir de tu mano la sangre de tu hermano.  Cuando cultives el suelo, no te dará más su vigor; vagabundo y errante serás en la tierra. 

Se cuentan que el homicidio de José Ramón se debió a reyertas que ya traía con Andrés Manuel, debido a que el menor era el hijo consentido de don Andrés, así como el Señor de los Cielos prefirió la ofrenda de Abel por encima de la de Caín que montó en furia, así Andrés también se mostraba furioso por la preferencia de su padre hacia su extinto hermano José Ramón.

Por eso a nadie le extrañe que Andrés Manuel patee a sus otros hermanos, despedace a su propia familia acusando a su hermano Arturo de ser un corrupto al servicio de la mafia del poder, y por  eso se dio el enfrentamiento verbal,  del cual dieron cuenta los medios de comunicación.

Y si así trata a su verdadera sangre, a quienes en el pasado lucharon a brazo partido por la democracia junto a él y por avanzar en la vida política de este país,  es entendible el por qué el peje tacha de corruptos a todos los que no le simpatizan, a todos los que no se pliegan a sus intereses, como ahora lo está haciendo con el Jefe del Ejecutivo que por encima de su convicción política, está los intereses de este estado y de su población y que no aceptó enfrentarse al gobierno federal para complacer a AMLO.

De la ingratitud de Andrés Manuel hacia quienes lucharon a su lado hay mucho que contar, utilizó a muchos y luego como Klennex los hizo a un lado para aliarse a sus enemigos políticos. Un dato cruel lo constituye el hecho de que allá en el municipio de Cunduacan hay una tumba abandonada, que ni siquiera le pudieron hacer una loza para enterrar a Samuel, aquel grandulón que portando en alto la bandera nacional, como abanderado, durante 51 días camino al frente del Exodo por la Democracia que en 1992 encabezó Andrés Manuel López Obrador, que en una verdadera complicidad encubierta con el ex-gobernador Roberto Madrazo se pusieron de acuerdo para derrocar del gobierno a Salvador Neme Castillo, pero esa será otra historia digna de contar, que no me la contaron, sino que viví todo el proceso de cómo se fraguó ese compló.

Pues bien, Samuel quien fuera el abanderado del Exodo por la Democracia  y por lo tanto ampliamente conocido por Andrés Manuel murió hace varios años en la más completa miseria, triste, abandonado a su suerte, fue enterrado en la vil tierra, no hubo una tumba digna para él a pesar que abrazó la lucha por la democracia, sus familiares no recibieron ninguna clase de apoyo por parte de AMLO cuando fue Jefe de Gobierno del Distrito Federal, vaya ni siquiera una veladora fue capaz de mandar a su memoria. Así es Andrés Manuel y no como lo pintan. 

Por eso a nadie le extrañe que Andrés Manuel López Obrador, que se ha erigido en adalid de la “democracia” es un malagradecido, ingrato, un tirano hasta con sus mismos hermanos, por esa razón Arturo ha preferido abrazar otra causa, advirtiéndole a Andrés que paré su tiranía que hay cosas de familia que como político que no se sabe, pero que al interior de la familia se conoce muy bien. Y finalmente otro dato, el colega periodista Azarías Gómez, fiel seguidor de la causa andresmanuelista en los momentos cuando la prensa era satanizada desde el gobierno, está muy enfermó, ojalá muestre su gratitud el peje y ya no siga siendo ingrato con quienes lo ayudaron a encumbrarse en la política cuando no valía nada. Ahí queda.